Reconocido, el combate del país a ese delito: Ibarrola Nicolín

Inaceptable, la sola mención de que México sea cómplice del narco

La corrupción se ha perseguido donde la hemos hallado, dice

De nueve recomendaciones de la OEA, cuatro se han acatado

GUSTAVO CASTILLO

El Estado mexicano no tiene complicidad con organizaciones criminales, y la corrupción se ha perseguido donde la hemos encontrado, afirmó el subprocurador de Asuntos Jurídicos e Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), Eduardo Ibarrola Nicolín, tras señalar que la lucha del país contra el narcotráfico es reconocida a nivel internacional.

En el contexto del informe de la Comisión Interamericana para el Control de Abuso de Drogas (CICAD), de la OEA, y los avances para la integración de un mecanismo de evaluación multilateral del combate contra el narcotráfico de cada nación, aseguró que en el gobierno de Vicente Fox se ha dado una lucha frontal contra ese delito.

El organismo de la OEA emitió nueve recomendaciones entre 1999 y 2000, de las cuales, en cuatro reconoce que ya han sido acatadas y en las cinco restantes insta a desarrollar esfuerzos para cumplir cabalmente con ellas.

En su informe, la CICAD señala que "observa con satisfacción los avances logrados" por México, aunque respecto a la producción de enervantes en territorio nacional "sugiere que se continúen los esfuerzos para medir la extensión de los cultivos ilícitos, con el fin de determinar el potencial global de producción".

Señala que "por medio del Consejo Nacional contra las Adicciones y de los Centros de Integración Juvenil, México brinda capacitación a países de Centroamérica" en cuanto a rehabilitación de adictos, y que "la evaluación preliminar de la CICAD dio resultados muy positivos que podrían incentivar el que otros gobiernos emprendan procesos similares".

El subprocurador de la PGR resaltó que será "relativamente sencillo" cumplir con algunas de las recomendaciones del organismo de la OEA, dado que los avances para solventar los compromisos contraidos son considerables. Las recomendaciones pendientes son ratificar la Convención Interamericana sobre Asistencia Mutua en Materia Penal, que México suscribió el 5 de junio de 2001; establecer un sistema nacional de programas de prevención, consolidando los ya existentes, como son los relativos a prevención, tratamiento y control de las adicciones; realizar evaluaciones de los programas de prevención en marcha para fines comparativos y utilizarlas en el diseño de nuevas estrategias, ya que actualmente las tareas de diagnóstico se centran en el seguimiento de las actividades del sector salud para la atención de las problemáticas emergentes.

Las otras dos recomendaciones hablan de "continuar el desarrollo de un sistema para determinar el potencial de producción, el área sembrada y los nuevos cultivos ilícitos de drogas, y la última se refiere a continuar los esfuerzos orientados a estimar el costo humano, social y económico del problema de las drogas".

Ibarrola Nicolín señaló que aunque las autoridades mexicanas que desarrollan la lucha contra el narcotráfico han obtenido resultados positivos, actúan sin actitudes triunfalistas, pero que de ninguna manera se puede aceptar la sola mención de que el Estado mexicano tenga complicidad con organizaciones criminales; señaló que en el gobierno del presidente Vicente Fox se ha luchado de manera frontal contra el narcotráfico, y no aceptaría complicidad, ya que hay grandes esfuerzos para combatir ese flagelo.

Finalmente, en el informe de la CICAD hay un capítulo denominado Evaluación del progreso de control de drogas, y en él se señala que "México cuenta con un programa nacional que cubre las áreas de reducción de la oferta y la demanda de estupefacientes, y contempla medidas de control, estructura institucional, presupuesto y sistema de evaluación", por lo que se reconoce la labor de las autoridades en la lucha contra el narcotráfico.