Ť Pereció de un balazo

Desecha la PGJDF linchamiento en la muerte de conductor

SUSANA GONZALEZ G.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal descartó que la muerte del conductor Héctor Guillermo Sánchez Pardo, ocurrida el sábado pasado en Iztapalapa, haya sido por linchamiento de los familiares y vecinos de dos mujeres que minutos antes había atropellado, al descubrir que el balazo que presentaba en la espalda provino de la pistola de David Flores, alias El Chino, quien viajaba en la parte trasera del automóvil.

En tanto, los resultados de la necropsia realizada por el Servicio Médico Forense confirmaron que Sánchez Pardo, de 21 años, pereció por las lesiones que le produjo en el corazón y en los pulmones el balazo que recibió en el lado izquierdo de la espalda. El impacto propició que el joven perdiera el control del vehículo y atropellara metros adelante a Noemí Cruz Campos y Rosalba Martínez, quienes ayer fueron dadas de alta en la clínica 47 del Seguro Social.

José Ramón Fernández Cáceres, director del Semefo, reveló que el cuerpo de Sánchez Pardo presentaba también diversas contusiones en la cara y el cuerpo. Con ello no se descarta que luego de haber arrollado a las dos mujeres, una de ellas embarazada, la gente haya golpeado al joven sin percatarse de que ya estaba herido.

La Policía Judicial obtuvo ayer información que echó abajo la versión del linchamiento, difundida a partir de los primeros reportes de la policía preventiva, y la hipótesis del intento de robo del vehículo establecida el domingo.

Carlos Ramírez Díaz, otro amigo que viajaba con Sánchez Pardo, relató que al atravesar la colonia Palmitas, sobre la calle Manuel Acuña, El Chino descargaba un arma de fuego, pero en un descuido la accionó e hirió de un balazo en la espalda a Sánchez Pardo. Ambas personas quedaron a disposición de las autoridades.