Ť El adolescente desapareció de su hogar cerca de Khost

Un menor, sospechoso de causar la primera baja a EU en tierra afgana

ANDREW GUMBEL THE INDEPENDENT

Miembros de consejos de ancianos de tribus de Afganistán sospechan que un joven de 14 años de edad fue quien dio muerte a Nathan Ross Chapman, el primer soldado estadunidense abatido bajo el fuego enemigo desde que comenzaron los ataques el pasado 7 de octubre, y afirman que ahora el muchacho ha desaparecido de su casa, cercana a la oriental ciudad de Khost.

Según fuentes citadas por Reuters en Miranshah, frontera con Pakistán, los ancianos de Khost habían decidido reunirse este lunes para discutir qué hacer con el joven, pero pospusieron el encuentro después de saber que se halla escondido.

No se dio a conocer el nombre del presunto culpable, y no hay pistas de cuál puede ser su paradero.

El sargento Chapman, de 31 años de edad, formaba parte de las Fuerzas Especiales de Estados Unidos y murió en una emboscada el viernes pasado cerca de la ciudad de Gardez, no lejos de Khost. Era miembro de un equipo de 25 efectivos desplegados en la provincia de Paktia que tenían como misión verificar las denuncias de que aviones estadunidenses bombardearon objetivos civiles. En un operativo realizado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) resultó herido durante una emboscada, junto con dos afganos que acompañaban a los estadunidenses.

De acuerdo con Reuters, el adolescente no es el único sospechoso por la muerte del soldado estadunidense. Se cree que otros cuatro hombres también estuvieron involucrados en la emboscada.

"Escuché decir que cuatro hombres abrieron fuego contra los estadunidenses y después huyeron", dijo Shahnawaz Tanai, un ex general afgano ahora residente en Pakistán. Las identidades de los cuatro hombres también permanecen en el misterio.

Desde la emboscada, helicópteros militares de Estados Unidos han trasladado más oficiales hacia el área, la cual fue golpeada por intensos bombardeos aéreos la semana pasada, en lo que funcionarios del Pentágono describieron como un asalto hacia la resistencia de la organización de Osama Bin Laden. La llegada de más refuerzos militares tendría como objetivo encontrar pistas sobre el paradero del hombre más buscado del planeta.

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