Gilly: más que justicia es venganza infinita
Querida Carmen: Ante las dimensiones bíblicas
de los acontecimientos corrientes, llamé a mi teólogo de
cabecera, Carlos Monsiváis, para preguntarle si denominar a una
operación militar Justicia Infinita no era, según
yo pienso, una blasfemia, al asumir el gobierno de Estados Unidos uno de
los atributos de Dios. Mi teólogo confirmó mi opinión
pero, como buen teólogo, le hizo leves y agudas correcciones, dándome
así a entender lo imprescindible de su oficio. Dijo:
"Sí, es una blasfemia, pero no consiste en creerse
Dios, sino en usurpar el lugar de Dios. La justicia humana, regida por
normas jurídicas, por definición es finita. Es una suma de
actos de justicia cada uno necesariamente circunscrito e imperfecto, completado
y extendido después por nuevos actos. Justicia Infinita significa
una justicia no sujeta a esos límites humanos. Es infinita en el
tiempo e infinita en su jurisdicción. Es colocarse en el lugar del
Ojo de Dios: nada ni nadie le escapará en el tiempo y en el espacio".
Agregó estas dos citas:
"Mía es la venganza y el pago, al tiempo que
su pie vacilará, dice el Señor en el Antiguo Testamento
(Deuteronomio, 32, 35). Y en la Epístola a los Romanos
(12, 19), Pablo repite: No os venguéis vosotros mismos, pues
dice la Escritura: Mía es la venganza: yo daré el pago merecido,
dice el Señor".
Fui entonces a mirar mi Biblia de cabecera. Allí
vi que la Epístola continúa de este modo (Romanos,
12, 20-21): "Antes al contrario: si tu enemigo tiene hambre, dale de comer;
y si tiene sed, dale de beber; haciéndolo así, amontonarás
ascuas sobre su cabeza".
Así, ojalá, sea.
Adolfo Gilly
Denuncia expulsión de estudiante minusválida
Señora directora: Un caso de discriminación
inverosímil se ha dado en la Universidad Americana de Morelos en
Cuernavaca: Úrsula Pardo Rodríguez, de 23 años, con
parálisis cerebral, fue expulsada el 26 de junio cuando terminaba
ya con promedio de 8.3 el sexto semestre de la carrera de Ciencias de la
Comunicación. La rectora Magda Ponce Hernández, ex esposa
de Juan Salgado Brito (candidato del PRI a la gubernatura de Morelos en
las elecciones pasadas y ex presidente municipal), no ha podido justificar
por qué de pronto Úrsula ?luego de tres años aprobados?
ya no tenía la capacidad intelectual para proseguir sus estudios.
El sentir de muchas de las compañeras de Úrsula
es que fue echada a la calle porque su apariencia física desagradaba
a los directivos de esa universidad (ubicada en Teopanzolco 620, en Cuernavaca).
La funcionalidad intelectual de Úrsula no necesita demostración,
como lo puede demostrar el diagnóstico neuropsicológico de
cualquier experto, a pesar de que su sistema motor derecho esté
paralizado. Tiene que andar en silla de ruedas. Y sólo le faltaban
tres semestres para concluir su carrera. Carmen Rodríguez de Pardo,
madre de Úrsula, sabe que tiene varias opciones para no permitir
este atropello:
1. Presentar una demanda ante el Ministerio Público
por violaciones a todos los artículos de la Constitución
que tienen que ver con la igualdad.
2. Acudir a la Comisión de Derechos Humanos de
Morelos y, si ésta se hace de la vista gorda, dirigirse a la Comisión
Nacional de Derechos Humanos.
3. Solicitar el apoyo de Gilberto Rincón Gallardo,
que está luchando por la defensa de los minusválidos.
Todavía algunos priístas y sus familiares
siguen sin darse cuenta de que ya se les acabó la película.
No entienden que la impunidad ya no es posible en este país.
Federico Campbell
Exigen al Ejecutivo la liberación del
general Gallardo
Señora directora: El 28 de agosto el general
brigadier José Francisco Gallardo Rodríguez fue trasladado
a la sección de castigo 150 de la prisión Neza-Bordo, donde
existían pocas condiciones de seguridad que, ligadas a la campaña
documentada y demostrada de persecución, acoso y hostigamiento instaurada
por el alto mando militar, representaba un alto riesgo para su integridad
física, mental y moral.
A partir de la denuncia pública, sumada al apoyo
y solidaridad de ciudadanos y organizaciones que presionaron a las autoridades
del estado de México, se logró que los internos de alta peligrosidad
fueran trasladados a otra sección y que el general Gallardo, aunque
siga en la celda de castigo de 2 por 3 metros y en condiciones paupérrimas,
cuente ahora con las mínimas condiciones sanitarias.
Sin embargo, las condiciones de limpieza y pintura fueron
modificadas mañosamente por la Dirección General de Readaptación
Social del estado con el objetivo de presentar un escenario disfrazado
ante los medios de comunicación, resaltando que el enorme basurero
denunciado desapareció por completo el día en que la prensa
asistió, reapareciendo al día siguiente, confirmando así
la farsa montada por la autoridad y que puede ser corroborada hasta la
fecha.
Las mentiras y contradicciones que fueron argumentadas
por las autoridades penitenciarias para justificar el cambio de celda del
militar fueron solapadas por la Comisión Estatal de Derechos Humanos
del Estado de México, usando como argumento que "el general Gallardo
habitaba una celda de cinco personas para él sólo".
La celda que habitaba era de 3 por 3 metros, donde las
autoridades acostumbraban hacinar a cinco o más internos. Se encontraba
sólo porque a partir del intento de homicidio sufrido en 1994 en
la prisión militar, la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos solicitó al gobierno mexicano asegurar su integridad, solicitud
que ha tenido que ser recordada continuamente para lograr las mínimas
condiciones carcelarias.
Por lo anterior, fraternalmente agradecemos la enorme
ayuda y solidaridad a la CIDH, Amnistía Internacional, PEN International,
Centro por la Justicia y el Derecho Internacional, Comisión Mexicana
de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, Comisión
de Derechos Humanos del PRD, CNDH (que en 8 años interviene para
solicitar medidas cautelares), al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas
y a todas las organizaciones nacionales, ciudadanos y personalidades que
manifestaron su preocupación pública. Su intervención
no sólo logró mejorar las condiciones carcelarias, sino que
dio un halo de protección al general Gallardo y familia, a los que
tantas veces se trató de lacerar.
Mi padre es un preso de conciencia; un tribunal de la
OEA respalda su inocencia, por lo que reiteramos la exigencia al presidente
Fox para que sea coherente con su discurso y lo libere inmediatamente.
A nombre de la familia Gallardo, José Francisco
Gallardo Enríquez
Precisión sobre la titularidad de juzgado
Señora directora: Agradezco la publicación
que, bajo el título "Denuncia parcialidad de Juez en el DF", se
hizo el día de ayer en El Correo Ilustrado, debiendo aclarar que
por error se dijo que se trataba del juez vigésimo de lo familiar,
cuando lo correcto es decir que se trata del licenciado Guillermo García
Vázquez, titular del Juzgado Vigésimo Noveno de lo Familiar.
Mucho he de agradecer se sirva publicar la presente para los efectos de
hacer la precisión correspondiente.
Héctor Arteaga Montes, defensor de oficio
Invitación
A la presentación de las controversias constitucionales
contra la ley indígena que interponen ayuntamientos de Morelos,
con la presencia de los pueblos nahuas de ese estado. La cita es hoy a
las 11:30 horas en el edificio de la SCJN, a un costado del Zócalo.
Responsables: Damián G. Camacho Guzmán y Erasmo Santamaría
Pedraza.
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Al foro de reflexión musical que abre su espacio
con un concierto a cargo de Yolanda Martínez y Edyta Plodzien (pianos),
Cuauhtémoc Rivera y Swan Serna (violines), Martha Meneses (voz)
y un debate sobre los grandes violinistas del siglo XX. La cita es hoy
en el salón 222 de la Escuela Superior de Música del CNA
a las 18 horas. Responsable: Erika Mues. Se reciben propuestas y sugerencias:
[email protected].
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