Señora directora: Como ha sido documentado por el periódico que usted dirige, el pasado 24 de junio David Cilia Olmos presentó una denuncia penal en la PGR en contra del doctor Jorge Carpizo Mac Gregor por el delito de encubrimiento de crímenes de lesa humanidad, en virtud de la desaparición de 206 expedientes que contenían la investigación de los hechos acontecidos durante la guerra sucia en el estado de Guerrero.

Como consecuencia de esta denuncia, Cilia Olmos ha sido objeto de diversas amenazas de muerte realizadas por desconocidos vía telefónica, las cuales se han multiplicado tras la aparición en La Jornada de las declaraciones del propio Cilia Olmos acerca de la desaparición de esos expedientes.

Para la Secretaría de Derechos Humanos del PRD las amenazas de muerte recibidas por Cilia Olmos constituyen también una amenaza para la investigación de los vergonzosos sucesos derivados de la guerra sucia. Su esclarecimiento y el castigo a los responsables es una condición para restaurar el Estado de derecho en nuestro país y para darle legitimidad a un gobierno que, según sus publicistas, representa el cambio.

Saúl Vicente Vázquez, secretario de Derechos Humanos del CEN del PRD

Prado, peligro para la democracia en AL, dice

Señora directora: Perdone la insistencia, pero agradeceré mucho sea ponderada la publicación de la presente.

Gary Prado es un embajador del crimen y de la impunidad. Representante del autoritarismo militar todavía existente, es también ejemplo de peligro para las transiciones a la democracia en América Latina. 

El ocultamiento de información sobre la guerra sucia, la pobre contribución de la CNDH en el proceso de liberación de Ericka Zamora Pardo, la falta de atención a solicitudes para el hallazgo de desaparecidos políticos y la nula efectividad ante el justo reclamo del cuerpo de Lucio Cabañas Barrientos son muestra de lo que simbólicamente (y en la realidad, por supuesto) trae consigo subestimar la presencia del espía Gary Prado entre los mexicanos. Es por estas razones que sea tan importante el gesto, abiertamente estético, de Alberto Híjar. 

Finalmente: ¡Viva el Che!

Miguel Angel Esquivel

Preocupados por la cancelación de red de teatros del IMSS

Señora directora: Solicito la publicación de la presente carta dirigida a Santiago Levy, director del IMSS; Sara Bermúdez directora del Conaculta; José M. Correa Ceseña, presidente de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, y José N. González Parás, presidente de la Comisión de Cultura y Educación de la Cámara de Senadores:

Los miembros de la comunidad teatral agrupados en la Academia Mexicana de Arte Teatral AC, expresamos a ustedes nuestra preocupación por la posible cancelación del programa Teatros del IMSS para la comunidad teatral, y por el uso que se les pueda dar a éstos.

Como todos sabemos, la red de teatros del IMSS fue creada en toda la República como parte importante de la seguridad social integral, cuyos recursos para su construcción y sostenimiento fueron y son aportados por trabajadores, patrones y el Estado mexicano a través de nuestros impuestos. 

La suerte de estos recintos no puede ser decidida unilateralmente en contra del teatro y la cultura nacionales. Por ello, solicitamos a ustedes una entrevista a la brevedad posible para comunicarles personalmente el sentir de la comunidad teatral a la que representamos. 

Quedamos en espera de su pronta respuesta.

Directiva de la Academia Mexicana de Arte Teatral: Luz Emilia Aguilar Zinser, Germán Castillo, Carlos Corona, Jaime Chabaud, Olga Harmony, Ana Ofelia Murguía, Gabriel Pascal, Víctor Hugo Rascón Banda

Demandan la salida de embajador boliviano

Señora directora: El Taller de Arte e Ideología (TAI) hace suya la acción digna del profesor Alberto Híjar que al arrojar una copa de vino a la cara de uno de los asesinos del Che Guevara, hoy embajador de Bolivia en México, demuestra que tenemos memoria histórica y adhesión a las mejores causas latinoamericanas: la lucha de nuestros pueblos y su liberación, de la que el Che fue y es uno de sus mejores exponentes. 

Con esta actitud, Alberto Híjar desenmascara a este pillo mañosamente colado en nuestro país, lo que representa una forma de apoyo al pueblo boliviano que no tiene la culpa de estar tan mal representado por un militar asesino.

 El pueblo de México se siente ofendido con semejante representante y demanda al gobierno foxista la salida de Gary Prado. A individuos como él o como el multiasesino Cavallo no los queremos en nuestros países.

Taller de Arte e Ideología: Raquel Bolaños, Cecilia Lazcano, Oralba Castillo Nájera, Sara Alvarez, Hilda Clement, Gonzalo López, José Luis Medrano, Miguel Angel Esquivel, Porfirio García, Alberto Martínez

Beneplácito por entrega de antirretrovirales

Señora directora: Deseamos expresar nuestro optimismo por la nota aparecida en La Jornada el 31 de julio, que reproduce el propósito de la Secretaría de Salud (Ssa) de proporcionar, al final de este sexenio, antirretrovirales para todos los enfermos de sida que carezcan de seguridad social y recursos económicos.

Frente a la auténtica preocupación y sensibilidad del doctor Julio Frenk, titular de la Ssa, y de sus cercanos colaboradores para con esta problemática, creemos que es de la mayor importancia que los legisladores sean copartícipes en esta empresa y asignen mayores fondos al presupuesto de salud para que esta aspiración sea una realidad antes de que llegue a su fin la gestión de este gobierno.

Amigos Contra el Sida AC, David Alberto Murillo

Vistoso operativo contra mazahua en el Zócalo

Señora directora: El domingo 22 de julio asistí de manera solidaria al plantón que integrantes de la sociedad civil queretana efectuaron en la Plaza de la Constitución, en la ciudad de México, con el objetivo de exigir la excarcelación de Sergio Jerónimo Sánchez y Anselmo Robles, presos políticos zapatistas en aquella entidad.

En el transcurso del acto político, grande fue mi asombro cuando observé a una camioneta de redilas, dos pick ups compactas, tres patrullas de la policía preventiva, dos automóviles de la Policía Judicial del DF rebosantes de uniformados con cascos, escudos y toletes, así como de agentes vestidos de paisano, comunicándose continuamente a través de teléfonos celulares y radios comunicadores portátiles y avanzar sigilosamente, de manera audaz, demostrando una gran preparación técnica, táctica y estratégica hasta aproximarse a su objetivo prioritario: una indígena mazahua (integrante de los 10 millones a los que recientemente premiaron los senadores con una contrarreforma de ley indígena) que junto con sus dos pequeños hijos vendía tlacoyos de nopales con queso.

Los representantes del Estado de derecho maltrataron con inusual violencia a la mujer y a sus vástagos, la despojaron del material subversivo que estaba distribuyendo en pleno Zócalo capitalino y emprendieron la huida de manera organizada, conservando entre sus manos el valioso cuerpo del delito. Sólo me pregunto: ¿así se construye la Ciudad de la esperanza?

Profr. Enrique Avila Carrillo

Comentario a la muerte de menor en la Alberca Olímpica

Señora directora: El día de hoy me enteré por medio de este prestigiado diario del fallecimiento de un pequeño de nueve años en la Alberca Olímpica mientras asistía a uno de los cursos de verano que se imparten en las instalaciones del Instituto del Deporte del DF.

Dichos cursos aglutinan a cientos de niños que cada año acuden entusiasmados en busca de nuevas experiencias, amigos, lugares y del ansiado acercamiento a la práctica deportiva que se les niega en las escuelas de la SEP y en toda instalación gubernamental. 

Durante el año escolar es casi imposible acceder al deporte en estos lugares porque no brindan a la sociedad espacios suficientes y adecuados. El país no cuenta con políticas gubernamentales serias en este ámbito, no sólo en el deporte olímpico y profesional donde la polémica globalización acapara el dinero del mundo para pagar sumas estratosféricas a deportistas profesionales que, en tales circunstancias, se ven orillados a doparse y venderse al mejor postor para cambiar la esencia del juego limpio.

Todo ello parecería ajeno al accidente, pero dejemos a la reflexión la muerte de un pequeño que lejos de contemplar un partido de balompié bebiendo y fumando, optó por hacer deporte y confió en un instructor que seguramente no estaba capacitado, en una instalación que seguramente no contaba con las medidas de seguridad, en que el gobierno del DF contaba con el apoyo suficiente del gobierno federal y, seguramente, creyó en el buen destino de los impuestos que el pueblo paga y que sólo sirven a intereses personales de banqueros, empresarios, gobernantes y políticos.

Norma Angélica Mendoza Rodríguez