Señora directora: Interesados por la vida cultural de nuestra ciudad y enterados de los cambios que en esta materia se están realizando en el Instituto de Cultura de la Ciudad de México, queremos referirnos a una de las obras más destacadas de esa institución: la Fábrica de Artes y Oficios de Oriente (FARO). 

Un basurero y un edificio abandonado fueron convertidos en un centro cultural y en una escuela de artes y oficios. La FARO es, después de casi un año de trabajo, un pulmón cultural en Iztapalapa, un espacio de diálogo abierto a las más diversas expresiones del arte y la cultura. Ubicado fuera del corredor cultural centro-sur, la FARO es un paso concreto en la descentralización de la oferta cultural de la ciudad. 

La disminución presupuestal ha afectado los trabajos de la FARO, sin embargo, la asignación de recursos para el presente año no detuvo la continuidad de sus programas: la FARO está hoy abierta y viva. 

Es por las razones antes expuestas que nos alarma la posibilidad de que este proyecto se vea cancelado por la presente administración. Estamos enterados de la solicitud general de renuncia al equipo fundador de la FARO, sin que las nuevas autoridades hayan realizado una visita a sus instalaciones y sin que mediara reunión alguna con sus coordinadores, maestros y alumnos. 

Creemos que la experiencia de la comunidad de la FARO debe ser considerada por las nuevas autoridades culturales. Nos sorprende que un hombre con la trayectoria de Enrique Semo haya tomado la decisión de solicitar la renuncia sin escuchar a quienes han colaborado con este nuevo espacio, una obra fundamental en materia de cultura del primer gobierno democrático de la ciudad de México. 

Gabriel Macotela, Elena Poniatowska, Carlos Monsiváis, Vicente Rojo, José Agustín, Roger Bartra, Teodoro González de León, Alberto Kalach, Eniac Martínez, Jesusa Rodríguez, Emilio Payán, Christopher Domínguez, Jordi Soler, José Luis Paredes (Pacho), Roberto Eibenschutz, Emiliano Pérez Cruz, Rita Guerrero, Poncho Figueroa, Liver Terán, Teresa del Conde, Domitila Domínguez (Domi), Jorge Alberto Manrique y 54 firmas más 

Ni cierre ni despidos en la FARO: Semo 

Señora directora: En respuesta a la inquietud que se ha manifestado recientemente sobre el futuro de la FARO, me permito informar que no hay ninguna intención y mucho menos una decisión de cerrar este importante espacio cultural, situado en una de las regiones de la ciudad más desfavorecidas. Mucho menos se ha pensado en despedir a quienes dirigen y participan en esta importante institución. 

Como todos los programas del Instituto de Cultura de la Ciudad de México, la FARO será analizada por la nueva dirección y los planes trabajo se discutirán con quienes allí laboran a la brevedad posible. 

Agradezco la publicación y le envío un cordial saludo. 

Enrique Semo, director general del ICCM 

"Criminal", la fusión de Banamex, opina 

Señora directora: Resulta francamente increíble que nuestro escenario económico y político haya alcanzado tal grado de cinismo a propósito de la venta de Banamex. Es evidente que unos cuantos, sobre todo los banqueros, se han estado beneficiando de las decisiones tomadas por el gobierno en el pasado cercano. 

Pensamos que lo peor había concluido con la gran carga del Fobaproa, sin embargo, todavía el desfalco a la nación no ha terminado, ya que lo poco que aún teníamos como rescatable, las instituciones financieras supuestamente fortalecidas, resulta que ahora son puestas en charola de plata a grandes consorcios internacionales mediante el pago de varios miles de millones de dólares a unos cuantos que invirtieron poco y ahora se llevan no sólo eso, sino también el dinero que salió del bolsillo de todos los mexicanos para apuntalar su banco. 

Espero que alguna de las instancias que tenemos detenga esa fusión a todas luces crimimal. 

Guillermo Medina T. 

Expresan solidaridad con Rosario Ibarra 

Señora directora: Los defensores de los derechos humanos del STUNAM, como pueblo, compartimos y apoyamos la postura de doña Rosario Ibarra de Piedra respecto de la Ley Federal contra la Desaparición Forzada de Personas que es imprescriptible, y gritamos: "vivos se los llevaron, vivos los queremos". Los culpables deben rendir cuentas conforme al Estado de derecho. 

Unidos con los derechos humanos para el bienestar social: Mariano Flores Nieto, Ana María Solares Basaldúa, Carmen Sosa García, Catalina Alvarado Vera, Máxima Castro, Candelaria Martínez, Isaac Zaragoza García, Felipe López López y varias firmas más 

Exigen al Congreso chiapaneco rechazar la ley indígena 

Señora directora: Solicitamos la publicación de la siguiente carta dirigida al Congreso del estado de Chiapas: 

La posibilidad de que se aprobara la iniciativa de ley de la Cocopa en el Congreso de la Unión había despertado grandes esperanzas porque finalmente se reconocerían jurídicamente y en los hechos los derechos de los pueblos indígenas del país. El clamor de dignidad y justicia salió de Chiapas en una marcha histórica y se manifestó en la más alta tribuna de México. Pensábamos que había llegado la hora de reconocer en la práctica lo que durante casi 200 años no se había querido reconocer: que en México conviven múltiples culturas y diversas formas de concebir el mundo, la vida, los anhelos, el desarrollo, y que todos debemos tener el mismo derecho a identificarnos individual y colectivamente: el derecho a construir nuestros propios destinos. 

Creíamos que términos como etnocentrismo y positivismo decimonónicos podían empezar a ser superados como adjetivos para el Estado mexicano. Pensábamos que podíamos comenzar a sentar las bases de un Estado moderno para México, ciertamente democrático, ciertamente plural. 

Los firmantes exigimos al Congreso de Chiapas sea rechazada la contrarreforma aprobada por el Congreso de la Unión y sea nuevamente reformada bajo los contenidos y el espíritu de los acuerdos de San Andrés y la iniciativa de Cocopa. 

¡Por el reconocimiento de los derechos y la cultura indígena! ¡Por el respeto a los acuerdos de San Andrés y la iniciativa de Cocopa! ¡Por un México democrático en donde quepamos todos y todas con dignidad! 

Academia de Antropología Social, Facultad de Ciencias Sociales de la UNACH y 115 firmas más 

Insuficiente el aumento a maestros; se quejan del impuesto al trabajo 

Señora directora: Los abajo firmantes, profesores del Centro de Actualización del Magisterio en el DF, queremos expresar nuestro rechazo al aumento del 10.5 por ciento al salario y 2.5 por ciento en prestaciones para los maestros del sector de homologados, así como el 11 y 2 por ciento en salario y prestaciones, respectivamente, para los profesores de educación básica. 

La política económica que está impulsando el actual gobierno se caracteriza por depauperar cada día más la calidad de vida de los trabajadores. Con el anuncio tan reiterado de la reforma fiscal, ratificamos nuestra preocupación, pues ésta representa un indicador de que la economía de nuestro país va a fortalecer la política económica neoliberal que impone el FMI a los países en desarrollo. 

Queremos denunciar que desde enero del presente año nos aplicaron un aumento al impuesto sobre el trabajo. Esta arbitrariedad ha impactado muy desfavorablemente nuestro ya deteriorado salario, pues aún antes de que se autorizara el aumento salarial, ya habían disminuido nuestras percepciones debido al impuesto sobre el trabajo. 

Estas acciones están pulverizando la economía de los trabajadores de la educación que vemos con indignación que el aumento anunciado no satisface las necesidades básicas de sobrevivencia. 

Por lo antes expuesto, manifestamos nuestro apoyo solidario a los compañeros que se encuentran en plantón en el centro histórico de la capital del país. 

¡No al IVA! ¡No al recorte presupuestal del gasto social! ¡Aumento salarial digno y justo! 

Maestros del Centro de Actualización del Magisterio en el DF 

Pesar de jubilado por recorte en su pensión 

Señora directora: Por medio de este conducto hago saber mi inconformidad con relación al pago extra acordado con las autoridades correspondientes para los jubilados y pensionados del seguro social, pues en estos días se dio la noticia que quienes percibimos una pensión de 2 mil 500 pesos mensuales ya no tendremos derecho a este beneficio. 

Soy un pensionado por cesantía, tengo 67 años y me jubilé cumpliendo con todas mis aportaciones, incluso rebasé las cotizaciones requeridas, por lo que creo que no es justo que me nieguen ese derecho ya que con esta pensión --muy pobre-- tengo que comprar medicamentos caros para mi esposa que padece una enfermedad crónica, a lo que se suma el gasto por los servicios de agua, luz, gas y demás. 

Es por eso que hago un llamado a las autoridades correspondientes para que se dé una solución favorable a mi petición. 

Miguel Flores Ramírez