Lunes 24 de noviembre de 2025, p. 24
Los bancos que operan en el país colocaron casi 2 millones de tarjetas de crédito en un lapso de un año, confirmó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Al concluir septiembre, estos intermediarios financieros tenían en circulación 38 millones 167 mil 686 tarjetas de crédito.
Al concluir septiembre de 2024 había 36 millones 195 mil 453 tarjetas, lo que significa que en 12 meses se colocaron un millón 972 mil 233.
Sólo entre agosto y septiembre, los bancos entregaron a sus clientes 140 mil 136 plásticos, es decir, 4 mil 671 al día.
La colocación de estos instrumentos aumenta en un momento en el que, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el crecimiento es menor al del año pasado y el consumo interno no aumenta: en septiembre el consumo privado apenas se movió 0.1 por ciento en la comparación mensual.
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), la colocación de plásticos suele aumentar cuando el consumo es débil, pues muchos usuarios los utilizan para completar sus gastos.
Los siete bancos de mayor presencia en México (BBVA, Santander, Banamex, Banorte, HSBC, Scotiabank e Inbursa) tenían en circulación al cierre de septiembre 31 millones 547 mil 148 mil tarjetas de crédito, 82 por ciento del total.
Las autoridades financieras han insistido en que el uso intensivo de tarjetas de crédito puede convertirse en un riesgo para los hogares, pues cuando los bajan y la actividad económica pierde tracción, la capacidad de pago se debilita.
La Condusef señala en diversas guías de educación financiera que el crédito no debe utilizarse para compensar caídas de ingresos, pues ello eleva la probabilidad de incumplimiento y encarece el costo real del financiamiento.
El Banco de México, por su parte, destaca en su Reporte de Estabilidad Financiera que en periodos de menor crecimiento los hogares tienden a incrementar el uso de crédito revolvente para cubrir gastos corrientes, lo que puede derivar en un aumento de la morosidad y en un deterioro de su salud financiera.












