Su construcción fue impuesta, sin consulta libre e informada, afirman
Lunes 1º de septiembre de 2025, p. 28
San Cristóbal de Las Casas, Chis., Los integrantes del colectivo Tsijil Ba Bij (Nuevo Camino) y del Congreso Nacional Indígena (CNI), en Agua Clara, municipio de Salto de Agua, manifestaron su “rechazo total al megaproyecto de la autopista San Cristóbal–Palenque, impuesto sin consulta previa, libre e informada”.
En un comunicado, afirmaron que la construcción de esa obra, que comenzó el 8 de junio pasado, “ha generado división en las comunidades y amenaza nuestra forma de vida”.
Señalaron: “nuestra tierra es raíz, alimento y futuro, no mercancía. Decimos fuerte: no aceptamos esta obra de muerte. Enfrentamos una tormenta que destruye la naturaleza y amenaza nuestra vida”.
Puntualizaron: “también sabemos que organizados podemos defender lo que nos pertenece. Por eso hacemos un llamado a todos los pueblos, colectivos y organizaciones solidarias a unirnos en defensa de lo que da vida: nuestros derechos, nuestra tierra y la vida de nuestros hijos”.
Expusieron que su lucha “es no violenta, pero es firme y decidida. Queremos un futuro digno para las generaciones presentes y futuras”. El texto fue difundido en el contexto de la conmemoración del sexto aniversario “de resistencia y rebeldía, de cuando su comunidad fue “víctima de agresiones e intimidaciones por ser pueblo originario tseltal, por defender los derechos humanos, la autonomía y el territorio”.
Aseveraron que “aquella violencia buscó sembrar miedo, pero no logró arrancar nuestra dignidad. Hoy reafirmamos: no al olvido, sí a la resistencia. Aquí seguimos y aquí seguiremos”.
Los miembros de Nuevo Camino y del CNI exigieron justicia por el asesinato del cura tsotsil, Marcelo Pérez, perpetrado el 20 de octubre pasado en San Cristóbal de Las Casas y “por nuestro hermano Simón Pedro Pérez López, integrante de Las Abejas de Acteal, ultimado el 5 de julio de 2021. Recordamos su palabra y su caminar, que son semillas de lucha que florecen en nuestros corazones”.
También demandaron “la liberación inmediata de nuestros hermanos tseltales de Cancuc: Manuel Sántiz Cruz, Agustín Pérez Domínguez, Juan Velasco Aguilar, Martín Pérez Domínguez y Agustín Pérez Velasco, presos injustamente desde el 29 de mayo de 2022. Su encarcelamiento es parte de la criminalización contra quienes defienden la vida y la autonomía”.