Viernes 15 de agosto de 2025, p. 29
Tapachula, Chis., El Instituto Nacional de Migración (INM) ofreció entregar documentos a los migrantes que integran la caravana Éxodo por la justicia, la cual avanza por la costa de Chiapas a fin de llegar a la Ciudad de México.
Los indocumentados pretendían que el INM instalara mesas de atención y les expidiera los permisos en el Parque Central de Pijijiapan, a donde arribaron el miércoles tras caminar 150 kilómetros durante ocho días. Sin embargo, las autoridades les dijeron que no era posible y tenían que ser trasladados a Tuxtla Gutiérrez, a lo que accedieron.
Unas 150 personas que aún formaban parte del éxodo subieron a los vehículos oficiales y fueron conducidos a dos oficinas migratorias en la capital del estado.
“Ya vamos en la guagua (autobús) para Tuxtla, nos van a dar papeles para que podamos subir y buscar trabajo que es lo que queremos, porque en Tapachula todo está complicado”, dijo el cubano Walter Bermudez.
Funcionarios de Migración explicaron que la atención se dará en dos bloques: visas humanitarias con vigencia de un año para aquellos que ya tuvieran procesos en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), y formas migratorias múltiples con validez de 30 días para quienes no tuvieran abierto ningún proceso.
“Una vez que nos den a todos los documentos nos vamos concentrar en el Parque de Tuxtla Gutiérrez para irnos todos juntos, porque hemos sabido de otros compañeros que les han quitado su salvoconducto o se los han roto, y los regresaron”, señaló otro extranjero.
La caravana salió de Tapachula el 6 de agosto y el grupo decidió no llegar a Estados Unidos por el endurecimiento de las políticas antimigrantes del presidente Donald Trump.
Su objetivo fue avanzar hacia otras entidades de México donde pudieran conseguir empleo, acceder a oportunidades y continuar con sus tramites de regularización.
En Tapachula, estuvieron varios meses y la Comar les negaba la condición de asilo o tardaron para darles una respuesta, mencionaron. Sin contar las condiciones de precariedad en las que vivían en dicho municipio fronterizo con Guatemala.