Miércoles 9 de julio de 2025, p. 4
En la elección del presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, los sectores duros de Morena y el Partido del Trabajo (PT) ya presentaron objeciones a que alguna legisladora panista asuma el cargo, en especial quienes han sido altamente críticas con el actual gobierno, como Kenia López –actual vicepresidenta– y Paulina Rubio.
Incluso un grupo de la bancada de Morena ha planteado que Acción Nacional no asuma la presidencia de la Cámara para el segundo año de ejercicio de la 66 Legislatura, pero ello implicaría no respetar la rotación prevista en la Ley Orgánica del Congreso.
El artículo 17 de la ley prevé que la elección de los integrantes de la mesa directiva para el segundo y tercer años de ejercicio de la legislatura se llevará a cabo durante la sesión preparatoria del año que corresponda, garantizando que la presidencia recaiga, en orden decreciente, en un integrante de los dos grupos parlamentarios con mayor número de diputados que no la hayan ejercido
.
Esto es, y conforme a la integración fundacional de la legislatura, el segundo año –a partir de septiembre– le corresponde al PAN y en el tercer año a un diputado del Partido Verde Ecologista de México.
Sin embargo, un sector importante de las bancadas de Morena, PT y PVEM, que cuentan con la mayoría calificada, no quiere que el blanquiazul presida la Cámara, pero en este momento ya no se puede modificar la Ley Orgánica del Congreso, y dentro de la bancada guinda también se considera que un cambio para no ceder la mesa sería muy delicado y enviaría un mal mensaje
.
En contraste, y como Morena cuenta con la mayoría calificada, el coordinador del grupo, Ricardo Monreal, presidirá tres años la Junta de Coordinación Política.
El acuerdo definitivo en Morena se tomará hasta mediados de agosto; en tanto, el ala menos radical plantea el respeto al artículo 17 de la Ley Orgánica y que los panistas decidan
. Conforme a las prácticas del PAN, el dirigente nacional, Jorge Romero, decidirá a quién proponer para presidir la mesa en acuerdo con el coordinador Elías Lixa. Incluso entre las filas panistas se habla de la vicecoordinadora, Noemí Luna.
Morena se opuso en 2019 a que el panista potosino Xavier Azuara presidiera la Cámara y Dolores Padierna –actual vicepresidenta– se refirió a él como un casi nazi
por su origen de ultraderecha, lo cual derivó en una crisis de cinco días que se avivó por la pretensión de Porfirio Muñoz Ledo de relegirse como presidente.
El conflicto se resolvió cuando el entonces dirigente panista, Marko Cortés, propuso a Laura Rojas, que logró el voto requerido de las dos terceras partes de los diputados.