Aun cuando el porcentaje de votos nulos a escala nacional alcanzó 10.9 por ciento –el más elevado en la historia– el comportamiento a nivel estatal y distrital fue contrastante. Con 26.2 por ciento de votos anulados, el distrito 2 de Tlaxcala –con cabecera en la capital– registró la proporción más alta en el país, esto es, uno de cada cuatro sufragios fue nulificado, un monto similar al alcanzado en la ciudad de Chihuahua, donde se reportó 24.43 por ciento.

En contraste, otro comportamiento atípico fue el registrado en al menos tres distritos de Chiapas, con una proporción inferior a la mitad de la media nacional. En el distrito 2, con cabecera en Bochil, únicamente fueron anulados 4 por ciento de los votos, en tanto que en Comitán el porcentaje se ubicó en 4.51 por ciento.

En general, Chiapas fue de las entidades con un marcado nivel a la baja de los votos anulados, pues en Tuxtla Gutiérrez se reportó 5.26 por ciento y en Tonalá 6.3.

De acuerdo con el último reporte del Instituto Nacional Electoral (INE), a nivel nacional fueron considerados inválidos 12 millones 433 mil 396 votos.

Chihuahua fue la entidad con mayor cantidad de distritos que duplicaron la media nacional de sufragios nulos. Con un porcentaje de participación ciudadana muy cercano al promedio nacional de 12 por ciento, en al menos cinco distritos la proporción de votos anulados duplicó el promedio nacional: en Parral se reportó 22.87; en el distrito 8 de la capital del estado, 22.7, y en Delicias, 20.98 por ciento.

Tlaxcala fue otra entidad donde la totalidad de los tres distritos reportó una proporción muy elevada de sufragios nulos: además de la capital del estado, en Apizaco se registró 17.91 por ciento y en Zacatelco 17.2 por ciento.

En otras entidades este comportamiento del voto nulo se dio en algunos distritos como Boca del Río, Veracruz, con 23.41 por ciento; Durango capital, con 22.86, y Xalapa, con 21.8, entre otros.

Al respecto, la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, dijo que al igual que en esta ocasión, en la elección de 1991, recién creado el Instituto Federal Electoral (IFE), la participación fue muy baja porque la población no confiaba todavía en que fuera un instrumento correcto, transparente, abierto, justo, que estuvieran los que debían estar en el padrón y también en la lista nominal.

Al paso del tiempo se pudo construir un órgano confiable y de colaboración con los ciudadanos. Estamos ante un fenómeno muy parecido, es la primera vez que se implementa; sin embargo, yo les puedo decir con toda tranquilidad: el INE lo hizo y lo hizo muy bien.

Los distritos con menor proporción de sufragios anulados son Cárdenas, Tabasco, con 4.7 por ciento; Altamirano, Guerrero, con 4.73; Zihuatanejo, 4.79; Macuspana, Tabasco, 5.6; Navojoa, Sonora, 5.8, e Izúcar, Puebla, 5.9 por ciento.