Domingo 20 de octubre de 2024, p. 5
Para disminuir la presión migratoria en la Ciudad de México, frente a la llegada continua de migrantes –muchos de los cuales pernoctan en campamentos irregulares ante la falta de albergues–, las autoridades capitalinas han gestionado traslados de estas personas en autobuses hacia los estados del norte del país, pero sin información clara ni la entrega de documentos de tránsito regular, denunciaron organizaciones civiles aglutinadas en el Grupo de Monitoreo Frontera Centro.
Expusieron que tan sólo el 12 de octubre pasado migrantes fueron trasladados a Zacatecas, quienes al ser dejados a su suerte
fueron recibidos en un albergue de una comunidad religiosa, en tanto que otros arribaron a San Luis Potosí.
Rodrigo Yedra, integrante del Grupo de Monitoreo, explicó en entrevista que el fin de semana pasado, entre algunos de los extranjeros que vivían en los campamentos de la Plaza de la Soledad en la Merced y en la colonia Vallejo, corrió el rumor de que saldrían autobuses a Monterrey
desde el Centro de Asistencia e Integración Social (CAIS) Tepito.
Detalló que, según la información recabada, la vinculación para que se gestionara el transporte fue a través del pastor de una iglesia que acompaña a una caravana migrante que llegó a la Ciudad de México hace dos semanas, procedente de Tapachula, Chiapas, y que había permanecido en el CAIS.
Yedra aseguró que varios de los migrantes que estaban en el CAIS y los que venían de los campamentos abordaron los camiones, pero en lugar de ir a Monterrey llegaron a Zacatecas al albergue de la Casa del Migrante. Las hermanas que administran ese espacio nos comentaron que arribaron 240 personas
, entre venezolanos, colombianos, cubanos y hondureños.
Además, enfatizó el activista, no les dieron ningún documento por parte del Instituto Nacional de Migración (INM), como la Forma Migratoria Múltiple y la Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias.
Nuestra preocupación es que las personas se encuentran más expuestas porque (sin documentos) el INM puede detenerlos en cualquier momento y devolverlos a Villahermosa, Tabasco, o Tapachula.
Recordó que una gran parte de los migrantes que están en México lo que buscan es entrar a Estados Unidos, por lo que requieren un permiso de tránsito para avanzar a la frontera norte en lo que esperan se les programe una cita de solicitud de asilo en ese país a través de la aplicación CBP One.
Diversas encuestas de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dan cuenta de que menos de 10 por ciento de quienes utilizan CBP One obtienen una cita, por lo que pueden tardar meses para lograr su objetivo.
Yedra subrayó que a este tipo de traslados de migrantes desde la Ciudad de México, que es ciudad santuario reconocida en la Ley de Interculturalidad, se suma el cierre de albergues como el de Tláhuac y el de la alcaldía Cuauhtémoc, así como los desalojos del INM que se han registrado en meses anteriores en campamentos irregulares en la colonia Juárez y en las inmediaciones de las centrales de autobuses del Norte y de la Tapo.
Lo que exigimos al gobierno es que si hace este tipo de traslados, sean de forma regular, cumpliendo los reglamentos de la ley de migración y convenios internacionales
, demandaron el Grupo de Monitoreo Frontera Centro, integrado por Cafemin, la Clínica Jurídica para Refugiados Alaíde Foppa y Chirla, entre otras.