Lunes 14 de octubre de 2024, p. a12
América aprovechó el mal momento por el que atraviesa Chivas para derrotarlo 2-0 y llevarse ayer el triunfo en la edición amistosa del clásico nacional disputado en el NRG Stadium de Houston, Texas.
Los goles de Rodrigo Aguirre, (minuto 20), e Illian Hernández, al 45+1, acabaron de hundir el ánimo de los rojiblancos, que la semana pasada se quedaron sin entrenador tras la salida del argentino Fernando Gago, quien luego de asegurar que permanecería en el equipo, finalmente dejó el banquillo para regresar a su país y firmar con el Boca Juniors.
Ante esta situación, Arturo Ortega, estratega del Tapatío, filial de Chivas, fue designado técnico interino para este encuentro, en el cual se notó el desconcierto que rodea al equipo.
Aunque al inicio del partido el club Guadalajara amagó con disparos de Ricardo Marín y Omar Govea, fue sorprendido al minuto 20, cuando un error garrafal de su portero Oscar Whalley, al no atacar apropiadamente el balón, permitió que un remate de Aguirre, con poca potencia y desde los linderos del área, invadiera su arco para conseguir el 1-0.
Carlos Cisneros tuvo la oportunidad de emparejar los cartones sólo cuatro minutos después, pero el guardameta de las Águilas, Rodolfo Cota, se quedó con la pelota.
A partir de ese momento, el juego se tornó ríspido, con muchas faltas por parte de ambas escuadras, lo cual generó diversas interrupciones. Fue hasta el minuto 45+1 cuando el América logró ampliar su ventaja. Un gran centro de Kevin Álvarez desde el sector derecho fue capitalizado por Hernández, quien tras imponerse en el salto al rojiblanco Antonio Pollo Briseño, soltó un potente cabezazo para encajar el balón en el ángulo y poner el 2-0 en la pizarra.
Al comienzo del segundo tiempo parecía que Chivas recortaría distancias en el marcador, pues al minuto 49, tras el cobro de un tiro de esquina, Uziel García encajó el balón en el arco americanista, pero el tanto fue anulado por un claro fuera de juego.
En adelante, ambos equipos intentaban sacudir las redes, pero ninguno lo conseguía, por lo que comenzaron a realizarse diversas modificaciones en ambos planteles, las cuales, tampoco fueron exitosas.
Los ánimos se calentaron, tanto en la tribuna como en la cancha, al minuto 75, cuando el árbitro expulsó a Richard Sánchez, de las Águilas, por tener presuntamente dos tarjetas amarillas, pero el jugador no había sido amonestado.
La acción generó intensos reclamos por parte de los jugadores azulcremas y de su técnico André Jardine, quien también fue amonestado. Instantes después se produjo un conato de bronca en la cancha, lo cual derivó en cartones amarillos para Isaac Cone Brizuela e Iván Rodríguez.
La afición también mostró su molestia arrojando bombas de humo al terreno de juego, lo cual afectó la visibilidad, por lo que el partido fue detenido, y aunque se reanudó unos minutos después, el marcador no volvió a moverse y Chivas se quedó con una derrota más ante su acérrimo rival.