Martes 17 de septiembre de 2024, p. 33
Ciudades como la de México y Guadalajara, pero en general el país, enfrentan una muy baja fiscalización de sus reglamentos de tránsito o normas viales, advirtió en entrevista Gonzalo Peón, director del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés).
Además, la falta de un registro nacional de matrículas y licencias de conducir y de sanciones que permitan a las diferentes entidades compartir estos datos, favorecen que motocicletas y vehículos con placas distintas a determinada localidad actúen como si tuvieran autorización para saltarse las normas de tránsito, apuntó.
Sin este registro, es prácticamente imposible fiscalizar adecuadamente el cumplimento de las normas viales y cambiar comportamientos, agregó.
Sobre el tema de las motocicletas, indicó que el sistema de cámaras de que se dispone no son capaces de captar las matrículas.
Tecnología deficiente, igual a pocas sanciones
Ciudades como Sao Paulo, Brasil, donde existen más de mil 500 kilómetros de redes primarias, cuentan con tecnología más eficiente, por ello las cámaras pueden captar las matrículas de las motocicletas.
Por otra parte, la cobertura de su sistema es más amplia, ya que hay 47 radares por cada 100 kilómetros de vías primarias.
En la Ciudad de México, donde hay una red de vías primarias prácticamente del mismo tamaño, sólo hay ocho radares por cada 100 kilómetros; en Guadalajara, sólo tres radares por cada 100 kilómetros. De esta forma, la posibilidad de ser sancionado es bajísima.
Una estrategia que ha dado excelentes resultados en la aplicación de esta fiscalización alrededor del mundo son los fotorradares (cámaras y radar de velocidad). En general, estas medidas han permitido reducir las muertes y lesiones por hechos de tránsito.
Desafortunadamente, en la Ciudad de México y en Guadalajara, al menos en el caso de muertes, en los segmentos donde hay radares no fue el caso, o cuando hubo algún cambio se perdió, porque estas políticas tienen rendimientos y efectos residuales que se van perdiendo en el tiempo
.