Martes 20 de agosto de 2024, p. 14
Washington. Cuatro años después de que el jefe de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, hizo de la lucha contra el desempleo una gran prioridad durante la pandemia de covid-19, ese compromiso se enfrenta a una dura prueba por un aumento del desempleo, una evidencia cada vez mayor de que la inflación está bajo control y una tasa de interés que sigue siendo la más alta en un cuarto de siglo.
Se espera que la Fed realice un primer recorte en su reunión de los días 17 y 18 de septiembre, y Powell podría ofrecer más información sobre el foco de la política de relajación monetaria en un discurso el viernes en la conferencia anual de la Fed de Kansas City en Jackson Hole, Wyoming.
Sin embargo, con la tasa de interés oficial de la Fed en el rango de 5.25-5.50 por ciento desde hace más de un año, el impacto de los costos relativamente altos de los préstamos en la economía todavía puede estar acumulándose y podría tardar en revertirse, incluso si el banco central empieza a bajar los tipos, una dinámica que pone en riesgo las esperanzas de un aterrizaje suave
de inflación controlada junto con un desempleo bajo y continuo.
Powell dice que el mercado laboral se está normalizando
, con un crecimiento salarial cada vez menor, ofertas de empleo todavía saludables y un desempleo en torno a lo que los responsables monetarios consideran coherente con una inflación en el objetivo de 2 por ciento, dijo el ex presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans. Sería estupendo si eso fuera todo. La historia no es buena
.
Esperar lo hará más difícil
De hecho, los aumentos de la tasa de desempleo, como los de los últimos meses, suelen ir seguidos de más.
Esa no parece ser la situación ahora. Pero puede que sólo falten uno o dos malos informes de empleo
para que se necesiten recortes agresivos de las tasas para contrarrestar el aumento de la desocupación, dijo Evans. Cuanto más se espere, el ajuste real será más difícil de realizar
, añadió.
Evans fue una voz clave en el replanteamiento del enfoque de la Fed, develado por Powell en Jackson Hole en agosto de 2020, mientras la pandemia hacía estragos, los funcionarios se reunían por videoconferencia y la tasa de desempleo era de 8.4 por ciento, frente a 14.8 por ciento de ese abril.