Puebla, Pue., Los ejidatarios de Ignacio López Rayón, del municipio de Tlahuapan, liberaron ayer en la mañana la autopista México-Puebla, después de cuatro días de bloquearla a fin de exigir el pago de sus terrenos que fueron expropiados hace 66 años para construir la vía.

Los inconformes también retiraron los cierres intermitentes que habían impuesto en el Arco Norte, a la altura de Calpulalpan y en los tramos Tlaxco-Tejocotal y Apizaco-Huamantla, en territorio de Tlaxcala.

La decisión se dio a conocer ayer a las 3:30 de la madrugada, después de una mesa de negociación que duró seis horas en la Casa Aguayo, sede del Ejecutivo estatal, donde participaron algunos campesinos y su abogado Jorge Portilla Alba; el titular de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación federal, Tonatiuh Ramírez Guevara, y el secretario de Gobernación de Puebla, Javier Aquino Limón.

Este último dio a conocer que se acordó que mañana los ejidatarios, sus comisiones y asesores serán recibidos en las instancias federales, para que se les de acompañamiento y seguimiento a sus demandas.

El funcionario estatal, quien fungió como intermediario, destacó que el desahogo de las vialidades es resultado de un diálogo abierto instruido por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, y el gobernador Salomón Céspedes Peregrina.

De esta manera, destacó, la administración estatal demuestra que es sensible, abierta y respetuosa a los mecanismos que coadyuven a la paz social y a la gobernabilidad, incluso, más allá de nuestro territorio.

Los campesinos se retiraron de las citadas arterias ayer a las 6 de la mañana, luego de haberlas cerrado casi 96 horas; el martes y el miércoles las bloquearon en su totalidad provocando filas de vehículos de más de 30 kilómetros, inconformidad en automovilistas y transportistas, así como pérdidas económicas de hasta 10 mil millones de pesos.

El jueves en la mañana los afectados accedieron a abrir el paso en la México-Puebla en intervalos de dos horas para cerrarla nuevamente por el mismo lapso y por la noche anunciaron que abrirían un carril en ambos sentidos, medida que se mantuvo el viernes.

Los abogados de los labriegos han explicado que en 1958 el gobierno federal expropió 41 hectáreas del ejido Ignacio López Rayón para construir la autopista citada, pero no efectuó la indemnización correspondiente

Por lo anterior, señaló, recurrieron a un proceso legal y hace casi dos años los tribunales agrarios fallaron en su favor, por lo que se ordenó a la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes a cumplir con los pagos.

A partir de esa fecha, se establecieron mesas de diálogo con las autoridades pero los campesinos no aceptan las cantidades que les han ofrecido, que aseguran que van de los 4 a los 40 pesos por metro cuadrado, por lo tanto piden que se haga un avalúo para conocer el precio justo de los terrenos en cuestión.