El proceso de aprobación de las reformas propuestas por el presidente Andrés Manuel López Obrador y la campaña del candidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, harán que septiembre sea complicado para los mercados financieros mexicanos, principalmente con un tipo de cambio muy volátil.

De acuerdo con Gabriel Casillas, economista jefe de Barclays para América Latina, la discusión de 18 de las 20 reformas que el presidente López Obrador envió al Congreso el 5 de febrero podría generar mucha volatilidad en los mercados locales.

Por un lado, excepto por la del salario mínimo, ninguna de las reformas tiene un aspecto positivo para el país, ya sea económico o democrático. Por otro lado, el efecto de las reformas podría ser tan negativo que una gran cantidad de participantes del mercado financiero internacional crean que las reformas se atascarán en el debate legislativo o se reducirán. La mayoría de las reformas se pueden aprobar sin muchos cambios, por lo que hay un amplio espacio para la decepción. El problema con las reformas no es fiscal, sino el deterioro institucional, aseveró Casillas.

Además, añadió, es muy probable que Trump lance la retórica de su campaña contra México. Es probable que use la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026 para amenazar con la imposición de aranceles si el gobierno mexicano no satisface ciertas demandas respecto al control de la migración indocumentada y el contrabando de fentanilo a Estados Unidos. Estos comentarios podrían tener un mayor impacto en septiembre, cuando la campaña comienza a tomar forma.

En opinión de Barclays, la llegada de Claudia Sheinbaum, virtual mandataria electa, será un cambio de paradigma a partir del primero de octubre, con una administración caracterizada por la toma de decisiones basadas en el análisis de costo-beneficio, la apertura a la inversión privada para lograr la transición a energías limpias y renovables y un enfoque serio del intrincado problema de seguridad que ha dejado atrás los abrazos, no balazos. Se puede recuperar el optimismo sobre México, especialmente si, en el diseño e implementación de las reformas de septiembre, la nueva administración puede mitigar los riesgos e incluso aprovechar la oportunidad para mejorar los efectos de estas reformas en el proceso de redacción de leyes secundarias.

Del mismo modo, agregó, los participantes del mercado financiero estarán complacidos si se propone un esfuerzo de consolidación fiscal factible, junto con un plan para Petróleos Mexicanos y un buen nombramiento para la junta de gobierno Banco de México, en caso de que no se desee volver a nombrar subgobernadora a Irene Espinosa, cuyo ciclo termina en diciembre.