El Gobierno de la Ciudad de México entregó obras de drenaje en el paraje Xicalhuacán, en la alcaldía Xochimilco, como parte del proceso de regularización de la comunidad asentada en una zona de valor ambiental.

En total se instalaron 12 kilómetros de tubería con mil 778 conexiones domiciliarias, 400 coladeras y una planta de bombeo de aguas residuales, explicó el titular del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), Rafael Carmona Paredes.

Ante el jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, señaló que estas obras, que tuvieron un costo de 132 millones de pesos, permitirán continuar con las acciones para regularizar viviendas, pavimentar el paraje y evitar que continúe la contaminación con aguas negras de los canales aledaños.

Carmona Paredes precisó que se elaboraron tres censos para conocer el número de conexiones para descargas domiciliarias, 296 adicionales a la establecidas en un principio, para llegar al total de mil 778.

Explicó que la tubería instalada es de polietileno corrugado de alta densidad; las excavaciones fueron rellenadas con tepetate compactado y se construyeron pozos de visita para tuberías de 30 a 61 metros de diámetro, que cuentan con una cama de grava graduada.

En cuanto a la planta de bombeo, localizada en la calle Nuevo León, permitirá llevar las aguas residuales de todas las viviendas por una tubería a presión hasta la zona del Museo Arqueológico de Xochimilco, agregó el funcionario.

El paraje Xicalhuacán forma parte del pueblo de Santa Cruz Acalpixca y es uno de los 48 asentamientos humanos que están por concluir su proceso de regularización del uso de suelo.

Como parte de esa tarea, señaló por su parte el director de Asuntos Jurídicos y de Gobierno de la alcaldía Xochimilco, Francisco Pastrana Basurto, se trabaja en el cumplimiento de diversas recomendaciones hechas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia y la Unesco, debido a que el asentamiento colinda con la zona de patrimonio cultural de Xochimilco.

Batres Guadarrama destacó que se beneficia a 37 mil 500 habitantes de la zona, que además de la regularización de sus viviendas evitarán problemas como inundaciones por aguas negras que llegaban a los canales de la zona chinampera de Caltongo.

Implica tres beneficios: eleva la calidad de vida de la gente porque ya no tiene que andar caminando entre aguas negras; permite trabajar directamente para la regularización de sus lotes y ayudamos a cuidar las sustentabilidad de la ciudad, porque protegemos los canales de Xochimilco, expresó.