Martes 11 de junio de 2024, p. 5
Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) descubrieron 26 entierros de antiguos mayas entre los municipios de Calakmul y Escárcega, en Campeche, durante las labores de salvamento arqueológico realizadas en el frente 6 del tramo 7 del Tren Maya.
En un comunicado emitido por dicha instancia se dio a conocer que luego de la excavación de los monumentos arqueológicos (previamente registrados) se confirmó que una decena de éstos datan de los periodos Clásico Temprano y Tardío (250-900 dC) y fueron hallados dentro de cistas.
En diferentes puntos de la distancia referida se registraron entierros humanos, la mayoría individuales, dispuestos en distintas formas: decúbito dorsal y lateral, extendido, flexionado, sedente; 10 de ellos acompañados de ofrendas
, señala la nota informativa.
A diferencia de los frentes 4 y 5, cercanos a grandes ciudades, como Xpujil o Becán, en el primer caso, o Balamkú y Calakmul, en el segundo; en el frente 6 no tenemos un sitio rector, sólo pequeñas concentraciones de plazas, algunas terrazas y unidades habitacionales modestas, en las cuales se hallaron muchos de los entierros.
Gustavo Alejandro Cool Argüelles, quien junto con su colega Armida del Rosario Bolaños presidió la excavación de los monumentos, luego de las labores de prospección, informó que “de los 26 entierros, 59 por ciento se ubicaron en basamentos, y 35 por ciento en cimientos.
En cuanto a las cistas –que consisten en un acomodo de piedras burdas–, el arqueólogo puntualizó que casi todas contenían los restos óseos de individuos que fueron ofrendados a estas edificaciones, salvo una, la cual contenía un cuenco cerámico, por esa razón estamos en la discusión sobre si el contexto pudo ser funerario o no
.
Un ejemplo singular fueron cuatro osamentas –registradas en los restos de una vivienda–, dos de las cuales estaban en cistas, en posición flexionada y con objetos cerámicos dispuestos a la altura de los huesos del pie y las costillas. Los vestigios de la construcción, ubicada entre las comunidades de Centenario y Silvituc, se excavaron y deconstruyeron; es decir, se desmantelaron de forma controlada.
Otro entierro singular fue descubierto a 1.5 metros de profundidad, al centro de una plaza, lo que señala la dedicación del individuo a este monumento
. Cool Argüelles añadió que, en torno a este espacio, el cual forma parte de un sitio prehispánico cercano a la localidad Justicia Social, en Escárcega, hay una serie de monumentos, de los cuales se excavó el de su lado sur.
A medida que los arqueólogos bajaron en la excavación, del lado norte ubicaron los muros de dos cuartos (denominados este y oeste), en cuyos accesos, y como parte de un derrumbe, descubrieron tres lápidas, de 70 por 45 centímetros, que pudieron formar parte de una fachada o servir de dinteles.