Viernes 7 de junio de 2024, p. 7
Madrid. SpaceX consiguió ayer que su prototipo de nave interplanetaria Starship volara en órbita terrestre y retornara al planeta de forma controlada, al igual que su cohete Super Heavy.
En su cuarta prueba de vuelo, la empresa de Elon Musk logró así el objetivo de desarrollar una capacidad de retorno controlado y eventual reutilización para su mayor sistema de transporte espacial.
Starship despegó a las 12:50 UTC desde la base de SpaceX en Boca Chica, Texas. La separación del cohete propulsor tuvo lugar a los tres minutos de vuelo, a 90 kilómetros de altura. Cuatro minutos después, este último –denominado Super Heavy– ejecutó un suave arribo en el Golfo de México, cumpliendo con éxito el primero de los objetivos de este cuarto vuelo.
Mientras, Starship alcanzaba la órbita terrestre con sus propios motores para realizar un vuelo orbital a 160 kilómetros de altura y a más de 26 mil kilómetros por hora en dirección al océano Índico. A los 45 minutos de vuelo comenzó la maniobra de inclinación para el reingreso en la atmósfera. Imágenes de una cámara a bordo registraron desprendimientos del fuselaje debido al intenso calor por la fricción a los 58 minutos de vuelo, a una altura 54 kilómetros.
Finalmente, pese a una señal de imagen deficiente, se pudo seguir el resto del descenso y registrar un amerizaje controlado de Starship en el océano Índico, al oeste de Australia, después de hora y cinco minutos de vuelo. Se daba por cumplido el segundo objetivo de la misión.
En el tercer vuelo, el 14 de marzo pasado, la nave se separó del cohete y alcanzó vuelo orbital. Sin embargo, se perdió sobre el océano Índico antes del amerizaje controlado previsto. Super Heavy tampoco fue recuperado.
En el contexto de los nuevos propósitos, se realizaron varias actualizaciones de software y hardware. El equipo de SpaceX también implementará cambios operativos, incluido el descarte del hot-stage de Super Heavy (la separación en caliente de las dos partes del cohete) después del retroceso con el fin de reducir su masa del cohete para la fase final del vuelo.
El cuarto vuelo siguió una trayectoria similar a la prueba anterior, con Starship apuntando a amerizar en el Índico, al oeste de Australia. Esta ruta no requiere una quema de desorbitación para el reingreso y al mismo tiempo brinda la oportunidad de cumplir el objetivo de reingreso controlado
, según Space X.
Starship y Super Heavy, llamados de forma colectiva Starship, representan un sistema de transporte reutilizable, diseñado para llevar tripulación y carga a la órbita terrestre, la Luna, Marte y más allá
, según la compañía.
Starship puede transportar hasta 150 toneladas métricas totalmente reutilizables y 250 descartables. Tiene una altura de 121 metros (50 corresponden a la propia nave) y un diámetro de nueve.