El presidente Arévalo planea un salvamento
Sábado 1º de junio de 2024, p. 24
Guatemala. El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, reconoció ayer que algunas zonas de la capital viven prisioneras
de las pandillas, al reaccionar a un llamado de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que actúe a fin de frenar el reclutamiento de menores por parte de esas bandas.
Uno de los problemas centrales que existen en este sentido es el abandono de las autoridades públicas y también de las comunidades de esas zonas en donde se está concentrando esta población que vive al margen y prisionera de la actividad de las pandillas
, indicó el mandatario en rueda de prensa.
Es una preocupación con la que nosotros nos identificamos plenamente
, agregó, tras indicar que como parte de la estrategia de seguridad se están diseñando medidas para contener la actividad criminal de las pandillas o maras
y tener mayor presencia de las instituciones del Estado en esas zonas. El gobierno busca generar alternativas de vida para que la juventud tenga oportunidades y no caiga prisionera
de esos grupos criminales que se dedican principalmente a la extorsión y al sicariato, manifestó.
Las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha se disputan el control de territorios para extorsionar a transportistas y comerciantes, quienes se niegan a pagar, son asesinados, de acuerdo conautoridades.
Antier, el Comité de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño pidió en Ginebra al gobierno guatemalteco aumentar las medidas de prevención para frenar esta actividad por parte de las bandas delictivas.
Naciones Unidas expresó su profunda preocupación por el adverso impacto de la violencia de bandas criminales en los derechos del niño
. El organismo recomendó al Estado de Guatemala abordar las causas de raíz del fenómeno, tales como la pobreza, la exclusión y la discriminación
. La petición se hizo durante un informe sobre el cumplimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño.