Una presentación singular e innovadora tuvo lugar durante el primer fin de semana de El Aleph, Festival de Arte y Ciencia, donde la música clásica, la danza contemporánea y la inteligencia artificial (IA) se fusionaron en el Centro Cultural Universitario (CCU) de la máxima casa de estudios.

El programa denominado Réquiem-AI combinó dos propuestas artísticas de suma relevancia: Réquiem de Mozart, de la reconocida coreógrafa Gloria Contreras, y Misa en IA, en la que participaron el Taller Coreográfico de la Universidad Nacional Autónoma de México (TCUNAM), la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata (Ojuem) y el Coro Staccato.

En la segunda obra, la música del genio de Salzburgo fue intervenida por el artista transmedia, compositor, curador e investigador mexicano Jaime Lobato, quien utilizó la IA en colaboración con un equipo del Instituto de Matemáticas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

A manera de introducción, fue reproducida una grabación que hizo la bailarina y coreógrafa emérita Gloria Contreras (1934-2015), en la que señaló: “Mozart murió en 1791 y dejó inconcluso su Réquiem. Esta pieza se conforma de nueve danzas interpretadas por 14 bailarines. Es difícil describirlas; el camino para conocerlas es vivir a través de ellas la emoción que su estética transmite.

“La gama es muy amplia, los ritmos y dinámicas, desde danzas de paz y tranquilidad hasta las vertiginosas y fuertes. Poco a poco este Réquiem va adentrando al ser humano en su interior y su camino es de aventuras emocionales; música y danza se unen en un solo mundo que nos permite conocernos.”

A través de movimientos gráciles y poderosos, los bailarines crearon una simbiosis emocional y conmovedora en el escenario, junto con los integrantes del Coro Staccato y de la Ojuem.

Según los organizadores del encuentro, la afluencia fue de poco más de 600 espectadores, quienes abarrotaron la sala Miguel Covarrubias del CCU, y continuamente elogiaron la actuación de los artistas.

Después de un intermedio, se presentó Misa en IA, coreografía de Irina Marcano y Arturo Vázquez.

El TCUNAM siempre ha sido un referente de nuevos planteamientos escénicos. La maestra Gloria Contreras, nuestra fundadora, vinculó por décadas la danza clásica con la música, las artes plásticas, la literatura y el folclor en un sinfín de propuestas escénicas, que hoy perpetuamos con nuestros nuevos procesos creativos, los cuales nos siguen manteniendo en constante creación y aprendizaje, explicó Irina Marcano, directora de dicha instancia.

Como artistas, estamos siempre abiertos a nuevas búsquedas de discursos y planteamientos, así como a la experimentación a la que nos abrimos en este programa especial. A través de algoritmos conocidos como IA ofrecemos un resultado cercano a ciertos parámetros a los que Mozart acostumbraba. Sin embargo, sólo fueron la base para seguir trabajando en una composición cercana a la realidad de la mano de la inteligencia humana.

Aunque Misa en IA fue de corta duración, ésta cautivó a la audiencia. Incluso algunos visitantes quisieron grabar parte de la presentación con sus celulares, pero otras personas no tomaron con agrado dicha decisión, debido a que les restaba visibilidad.

A pesar de este breve inconveniente, los asistentes quedaron fascinados con la actuación. Testimonio de ello fueron los aplausos y ovaciones prolongadas que hicieron al final de la pieza.

“Hay muchas obras en la historia que, por diferentes circunstancias, el compositor dejó inconclusas. El Réquiem de Mozart fue terminado por su alumno, Xaver Süssmayr”, explicó Marco Antonio Ugalde, director del Coro Staccato, en entrevista con La Jornada.

En El Aleph también ofreceremos otro concierto, el 16 de mayo a las 18:30 en la sala Carlos Chávez, donde interpretaremos obras inconclusas del Renacimiento o del Barroco, además de algo más escrito por IA, creado en vivo en el escenario y leído por el coro a primera vista. Ya veremos la reacción del público, concluyó.