Un muerto ha dejado ya el mayor incendio forestal de la historia de Texas, el cual resulta difícil de controlar para los bomberos. El presidente Joe Biden atribuyó el desastre a los efectos del cambio climático. Según el Servicio Forestal del estado, seis incendios permanecían activos ayer, cinco de ellos en el norte. El mayor foco, denominado Smokehouse Creek, arrasó este jueves unas 345 mil hectáreas y también afectaba una parte de Oklahoma.