El etnólogo Andrés Medina presentó la redición de Cuerpo humano e ideología
Domingo 25 de febrero de 2024, p. 3
Las aportaciones que realizó el historiador Alfredo López Austin (1936-2021), especialista en la cosmovisión de los pueblos mesoamericanos y de la cultura precolombina, siguen vigentes porque fomentan el debate entre la comunidad antropológica y al mismo tiempo lograron una renovación de la etnografía
, aseguró el etnólogo Andrés Medina Hernández.
El también investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) presentó ayer en la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería una redición del libro Cuerpo humano e ideología: Las concepciones de los antiguos nahuas. Tomos I y II, de López Austin.
La relación entre la ideología y la cosmovisión también queda implícita en esta obra. Ambos conceptos proceden de tradiciones filosóficas distintas y generan discusión
, explicó Medina Hernández, colega y conocedor de la obra de López Austin.
Alfredo nos plantea el cuerpo humano como modelo del universo; esta postulación nos permite entender varios aspectos culturales de los pueblos indígenas. La obra trasciende en el tiempo, aunque fue publicada por primera vez en 1980, debido al impacto que tiene en las ciencias antropológicas y en las futuras generaciones.
Publicado por la UAM y el IIA, Cuerpo humano e ideología... trata de aproximar el pensamiento que acerca del cuerpo humano tuvieron los pueblos nahuas que vivieron el violento choque entre Mesoamérica y España.
El autor utilizó como fuente los testimonios escritos en letra latina y, entre éstos, dio prioridad a los de lengua indígena. La preferencia de estos documentos obedece a que en ellos queda plasmada en forma más cierta y precisa la ideología
, se advierte en el ejemplar.
La elección de las fuentes escritas en lengua latina conduce a establecer los límites del objeto de estudio, que fueron, en este caso, los que abarcan las concepciones de los pueblos de habla náhuatl que habitaron el Altiplano Central de México, ya que fue en esta región en donde se produjeron los documentos más ricos.
Andrés Medina sostuvo que con este libro, López Austin también influenció los proyectos del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
“En 1998, el instituto emprendió una iniciativa que involucró a los pueblos indígenas de México, que requirió una organización de todos sus equipos regionales para realizar investigaciones geográficas y estudiar sus particularidades. Los estudios de López Austin abrieron brecha en ese rubro.
Esta obra sigue generando muchos debates; es un pilar que fomenta el trabajo de aquellos investigadores que con sus publicaciones aportan conocimientos a la sociedad a partir de la antropología
, concluyó.
Al acto, efectuado en la Galería de Rectores, también acudieron la historiadora y traductora Berenice Alcántara y la investigadora Ana Pérez Castro.
López Austin fue uno de los más connotados estudiosos del México precolombino. Nació en Ciudad Juárez, Chihuahua, y falleció a los 85 años en la Ciudad de México.
Licenciado en derecho y maestro y doctor en historia, también se desempeñó como investigador emérito en el IIA, además de docente en la carrera de historia en la Facultad de Filosofía y Letras, y en la de Antropología de la Escuela Nacional de Antropología e Historia.
Entre los galardones que recibió se encuentra el Premio Nacional de Artes y Literatura en 2020 en historia, ciencias sociales y filosofía.