espacio vivo de la comunidad
Ubicado en Iztapalapa, tiene una capacidad para recibir a 5 mil visitantes // Es un homenaje a la lucha por los derechos culturales: Martí Batres
arte, ciencia y tecnología se combinen para ofrecer experiencias lúdicas, significativas en torno a un problema fundamental: el cambio climático, dijo Claudia Curiel de Icaza, secretaria de Cultura de la Ciudad de México.Foto Yazmín Ortega Cortés
Domingo 25 de febrero de 2024, p. 2
Lo mismo una inmersión en diferentes ecosistemas mexicanos –desde una cueva con murciélagos hasta el fondo del lago de Xochimilco habitado por ajolotes– que un viaje sideral interactivo por las diferentes constelaciones estelares, son parte del fascinante recorrido que se ofrece en el Museo Yancuic, inaugurado este sábado en Iztapalapa.
Este coloso de concreto y acero –de casi 20 mil metros cuadrados de superficie de construcción y 36 metros de altura, distribuidos en cinco niveles– tiene capacidad para recibir de manera simultánea a 5 mil visitantes, con el gran beneficio de que la entrada es gratuita.
Ello contrasta con el Papalote Museo del Niño –al que, por cierto, en 2017 la administración anterior había otorgado la concesión para montar en ese mismo predio un museo infantil–, cuya localidad cuesta regularmente 240 pesos por persona y ahora ofrece una promoción de 195 pesos, según su página en Internet.
El Museo Yancuic, cuyo nombre significa nuevo
en náhuatl, tiene como vocación erigirse en un espacio vivo, abierto a la imaginación y reflexión participativa en comunidad, donde arte, ciencia y tecnología se combinen para ofrecer experiencias lúdicas, significativas en torno a un problema fundamental: el cambio climático, el calentamiento global y la sostenibilidad, a fin de que deriven en propuestas para reducir el impacto en nuestro entorno y contribuyan a crear comunidades resilientes
, definió la titular de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, Claudia Curiel de Icaza.
Proceso de rescate
En la ceremonia , el jefe de Gobierno, Martí Batres, lo destacó como un homenaje a la lucha popular, a lo público, a los derechos a la cultura, al conocimiento y a la infancia
, al recordar que allí se pretendía construir una plaza comercial y un museo privado.
Pero la lucha popular que se dio en la administración pasada obligó a las nuevas autoridades a cambiar el rumbo
, precisó el funcionario, quien agregó que ese recinto es resultado de un esfuerzo del gobierno capitalino no sólo en obra pública, construcción y difusión de la cultura, sino que forma parte de un proceso de rescate de lo público y de desprivatización de diversos proyectos que venían de la administración pasada.
De Icaza subrayó que, con la apertura de este nuevo espacio, la secretaría local de Cultura entrega la última obra a la que se comprometió en esta administración.
Sostuvo que se trabajó siguiendo dos ejes cruciales para el gobierno de la urbe: la protección medioambiental y el bienestar social, enfocados en recuperar parques públicos, el reciclaje, el desarrollo social, la igualdad de oportunidades para infancias y jóvenes, a fin de garantizar los derechos a la ciudad y a la educación.
Refirió que el proyecto fue pensado a fin de “innovar y desafiar la noción museística tradicional, para centrarnos más en las personas e invitarlas a habitar este espacio de manera activa y creativa. Es decir, no sólo habrá salas de exhibición que se pueden ver una vez, sino espacios para que los estudiantes y las comunidades jóvenes de Iztapalapa tengan espacios de estudio y de talleres.
Otro tema que se busca subrayar es el de las mujeres, dijo, y con el fin de visibilizar las contribuciones de científicas relevantes en la historia de la ciencia en México, algunas salas del recinto llevarán sus nombres.
Por ejemplo, el foro multimedios bautizado Katya Echazarreta, en homenaje a la jalisciense de 28 años, primera mexicana en viajar al espacio y quien asistió al acto como invitada. Ahí afirmó que el país lleva 40 años en la carrera espacial, y pese que hay talento humano, en vez de crear su propia tecnología, la compra a otros países.
Katya Echazarreta informó que traerá a la a la Ciudad el campamento de simulación de misión espacial a Marte, cuya primera edición tuvo lugar en Jalisco, el cual será gratuito y en el que jóvenes estudiantes aprenderán temas de ingeniería, electrónica, mecatrónica, programación, ciencia, astronomía, astrofísica, ciencias planetarias; sicología y nutrición espacial, tendrán acceso a un simulador aéreo, trajes espaciales, para luego simular el viaje al planeta rojo.
Echazarreta señaló también que se avanza en una reforma para dar prioridad a las actividades espaciales, pues se trata de una industria que, según las proyecciones, generará un trillón de dólares en 2040.
El foro que lleva su nombre está equipado para cine y artes escénicas, y estará enfocado a la divulgación científica y sus actividades comenzarán con un ciclo de cine sobre temas ambientales, con realizaciones de niños de México, Bolivia, Cuba, Chile y Argentina, de las que se proyectarán tres funciones al día.
La astrónoma Julieta Fierro es otra insigne científica cuyo nombre bautiza la nueva librería que el Fondo de Cultura Económica (FCE) abrió en ese espacio, la 107 de su red, que para finales de administración se incrementarán a 110, con una más también en Iztapalapa, señaló Paco Ignacio Taibo II, director de esa casa editorial.
Según Claudia Curiel de Icaza, con este museo también se hace un reconocimiento a la diversidad social y lingüística de esa alcaldía, a su biodiversidad, así como a la convivencia, el aprendizaje y el juego, herramientas de transformación y de desarrollo sostenible.
Por ejemplo, tenemos textos en español, en náhuatl y en inglés. También vamos a tener mediadores en lenguas originarias los fines de semana, para que podamos involucrar a las comunidades.
El Museo Yancuic cuenta con cuatro salas sobre cambio climático: Diálogo y acción, Ecosistemas y diversidad, Crisis y Resiliensia, Sistema Solar y Cosmovisión, con las cuales se busca mostrar las causas, pero también soluciones, e invitamos a muchos artistas, colectivos, artistas muy jóvenes, todos mexicanos, que son los que hicieron este museo
.
Además, hay dos estaciones educativas para el intercambio de conocimiento y formación de niños y jóvenes, a partir de actividades de formación con las mejores universidades de la ciudad, como las universidades Nacional Autónoma de México, Autónoma Metropolitana, y Autónoma de la Ciudad de México.
De igual manera, se cuenta con el Taller de Arte Urbano y Arquitectura de la Ciudad de México, con el que el museo saldrá a las calles para brindar soluciones urbanas y sostenibles
mediante la colaboración interinstitucional.
Tendremos residencias artísticas para el reciclado de basura. Todo lo que llegue al museo le vamos a dar una vuelta, pero a través de reflexiones de arte y de ciencia; también vamos a generar soluciones pequeñas para las comunidades con este taller de arquitectura
, indicó Claudia Curiel. El primer colectivo residente será El Volador.
A lo anterior se suma un área para el estudio y la convivencia, denominado Pabellón Arrecife, y el espacio multiusos Helia Bravo Hollis, nombre de una de las pioneras en la botánica mexicana, pensado para conferencias y conciertos, además de albergar un nuevo local del proyecto Pilares.