Domingo 25 de febrero de 2024, p. 30
A seis años de la desaparición de Pamela Gallardo Volante, familiares y organizaciones que buscan a personas ausentes esperan los resultados de los análisis a restos óseos que encontraron el pasado viernes en la zona del Ajusco, en el último día de la jornada de exploración que realizaron cerca de donde se le vio por última vez.
Pamela desapareció el 5 de noviembre de 2017 en el kilómetro 13.5 de la carretera Picacho-Ajusco, alcaldía Tlalpan; desde entonces, su familia no ha parado de buscarla y el lunes 19 de febrero iniciaron nuevamente una jornada en compañía de integrantes de la organización Hasta Encontrarles. Han recorrido varios kilómetros del Ajusco y la mañana del viernes localizaron cinco elementos óseos humanos
que serán analizados por personal especializado.
Tras el hallazgo, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) resguardó el área, en el kilómetro 12 de esa vía, donde se hizo la cuarta jornada de búsqueda y empezaron los trabajos forenses y de criminalística.
Al parecer los restos son huesos de las manos, entre falanges y metacarpos, que se encontraban semienterrados y cubiertos por escombros.
Ante eso, la familia de la joven seguirá con las tareas que ellos mismos promovieron ante las nulas acciones de las autoridades estatales y federales, quienes desde las Comisiones de Búsqueda deberían de ser las responsables de gestionarlas e impulsarlas
.
Además de autoridades, participaron allegados de desaparecidos, con el acompañamiento del colectivo Hasta Encontrarles y el Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social.
La familia expuso que la colaboración no ha sido sencilla y se quejaron de que han recibido un trató indolente, ofensivo e incluso agresivo de la FGJ.