Jueves 1º de febrero de 2024, p. 21
Brasilia. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó ayer que los países ricos deben ocuparse de sus consumidores de drogas para ayudar a combatir el tráfico internacional y prometió que su gobierno actuará con firmeza contra la industria multinacional del crimen organizado
.
Afirmó que es necesaria una fuerte inversión en inteligencia para atrapar a los cabecillas de las organizaciones criminales.
El crimen organizado hoy no es cosa fácil de combatir, porque se ha convertido en una gran industria multinacional, más grande que General Motors, que Volkswagen, que Petrobras. Es una cosa muy poderosa
, destacó el mandatario.
Es algo tan difícil que muchas veces un país rico como Estados Unidos piensa que la lucha contra las drogas se resolverá poniendo una base militar en la Amazonia o en Colombia. El problema no son las drogas, sino el cómo va a cuidar un país rico de sus consumidores
, señaló.
Lula recordó que el narcotráfico internacional envía estas drogas a puertos de todo el mundo, como los de Ámsterdam y Estados Unidos, lo que demuestra lo bien estructuradas que están estas organizaciones.
Defendió la necesidad de humanizar
la lucha contra lo que llamó pequeña delincuencia
, cometida por personas más humildes
, al tiempo que afirmó que es necesario jugar muy duro
contra lo que llamó industria del crimen organizado internacional
.
Para ello, puntualizó, es necesario invertir en mucha inteligencia, porque atrapar a esta gente siempre es más complicado
.
En tanto, el empresario brasileño Luciano Hang, simpatizante de Jair Bolsonaro, tendrá que pagar más de 17 millones de dólares en concepto de multas e indemnizaciones por haber coaccionado a sus empleados para que votaran a favor del ultraderechista en 2018.
Hang está acusado de amenazar con despedir a sus trabajadores y cerrar sus tiendas en caso de que el entonces rival de Bolsonaro, Fernando Haddad (Partido de los Trabajadores), hoy ministro de Economía, ganara las elecciones.