Sábado 2 de diciembre de 2023, p. 9
En el Día Mundial de Lucha contra el VIH/sida, ayer integrantes de Vihve Libre, Infancias Visibles y Frente Antifascista No Binarie, se manifestaron en la entrada de las oficinas del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el Sida (Censida), en Polanco.
Tras romper los vidrios de la fachada del edificio, sacaron al menos tres sillones que apilaron a la entrada y les prendieron fuego. Las llamas fueron apagadas por policías capitalinos con extintores. No se reportaron heridos; los trabajadores fueron desalojados.
Con pintas, denunciaron serofobia
y colgaron pancartas en las que se leía desabasto
, ya que no les surten antirretrovirales. También pegaron carteles con la leyenda “CenSIDA No juegues con nuestras VIHdas y pegaron recetas sin surtir.
Alain Pinzón, director de Vihve Libre, precisó que protestaron por la falta abastecimiento de antirretrovirales, de insumos y programas de prevención a nivel nacional, así como por el acoso en contra de activistas y organizaciones de personas que vivimos con VIH
.
Aseguró que Alethse de la Torre, directora general del Censida, ha desplegado una campaña de persecución en contra de activistas
defensores de personas que viven con VIH; para que dejemos de donar medicamentos, nos ha puesto quejas en contraloría de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, y quiere poner una denuncia en mi contra
.
La intención de los manifestantes era clausurar de forma simbólica las oficinas de Censida, porque esta ha sido una de las peores administraciones
. Además de medicamentos, faltan espacios para la hospitalización de personas con enfermedades derivadas del sida
, entre otras deficiencias.
Aparte, integrantes de AIDS Healthcare Foundation México (AHF), advirtieron, que el mundo suma 42 años con sida y pareciera que la eliminación de las transmisiones y el fin de las muertes por la enfermedad aún están lejos. El sida es una pandemia que aún no termina
.
AHF México, junto con organizaciones internacionales, exigieron a líderes mundiales, instituciones de salud pública y a la sociedad civil en general, que se tomen acciones contundentes para terminar con las inequidades que favorecen la transmisión de VIH y las muertes por sida
.
Según Onusida, hay 2.5 millones de personas que viven con VIH en América Latina y el Caribe y hasta 54 mil fallecieron por causas relacionadas. Vidas que pudieron salvarse si hubiesen tenido acceso a información, diagnóstico y tratamiento
.