Por agresiones verbales y físicas sufridas por un menor en seis ocasiones entre agosto y octubre por parte de la profesora de español María Espejel Nieto en la Preparatoria 4 de la Universidad Nacional Autónoma de México, su padre Juan Antonio Alarcón presentó una denuncia.

De esa manera, el agente del Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación de Delitos en Agravio de Niñas, Niños y Adolescentes inició la carpeta CI-FIDCANNA/59/UI-3/ C/D/04082/10-2023 por violencia familiar equiparada.

El querellante señala que la dirección de la escuela Vidal Castañeda y Nájera sabía que había agresiones porque tenían conocimiento de un caso previo, pero no hicieron nada, y pueden ser más, pero el miedo a sufrir una agresión o humillación, como es el caso de mi hijo, los ha hecho callar.

La primera agresión fue el 29 de agosto pasado, en el salón B109, cuando la profesora les pidió un poema a la madre, el cual no pudo escribir mi hijo porque su mamá lo abandonó cuando tenía tres años y yo hago el papel de ambos.

En respuesta, la docente le espetó que era un pendejo, que se veía ridículo que no pudiera hacer un poema de amor a una madre, que su papá no es su mamá, que era un burro y no iba a pasar de perico a perro.

A la violencia sicoemocional sufrida en las clases durante esos meses frente a sus compañeros, se sumaron los golpes y su expulsión del salón, lo cual ha llevado a que el menor no coma y se niegue a ir a la escuela.

El 3 de octubre pasado, cuando evaluó a mi hijo, le puso 4.2 porque según le dijo, el 10 es para los chingones, el 9 es para mí y el 8 para el que me cae bien, lo cual se asentó en la carpeta de investigación, así como el resultado de una constancia terapéutica.

El señor Alarcón agregó que la violencia sicológica y física proferidas por la profesora de 45 años hacia mi hijo me llevó a acudir a un perito en sicología, quien le otorgó tres sesiones urgentes debido a la ansiedad, dificultades para dormir e ideas suicidas que presenta. Lo que pido a la fiscalía es que proceda contra esta profesora que ha afectado física y emocionalmente a mi hijo ante la permisividad de las autoridades universitarias.