Jerusalén. El ministro israelí de Asuntos de Jerusalén y Patrimonio, Amihai Eliyahu, aseveró ayer que un ataque nuclear contra la franja de Gaza es una opción, en declaraciones que fueron rechazadas por la Autoridad Nacional Palestina (ANP), la Liga Árabe, Arabia Saudita y Siria, mientras el premier Benjamin Netanyahu ordenó suspender la participación del ministro en las reuniones del gobierno hasta nueva orden.

Eliyahu declaró en entrevista con la radio Kol Berama que no estaba totalmente satisfecho con el alcance de las represalias israelíes en el enclave palestino tras el ataque de Hamas el 7 de octubre, en el cual murieron mil 400 israelíes; en cuatro semanas de bombardeos israelíes, han perdido la vida 9 mil 700 palestinos.

A la pregunta sobre si la solución sería una especie de bomba nuclear en toda la franja de Gaza para matar a todo el mundo, el ministro respondió: es una opción.

Cuando el periodista le señaló que eso implicaría un alto precio para Israel, Eliyahu dio a entender que estaba dispuesto a poner en peligro la vida de los más de 240 rehenes retenidos por Hamas en el enclave.

En una guerra se tiene que pagar un precio. ¿Por qué las vidas de los rehenes son más importantes que las de nuestros soldados?, señaló.

También expresó su desacuerdo con el suministro de cualquier ayuda humanitaria a Gaza, al indicar que Israel no transferiría ayuda humanitaria a los nazis y que en el enclave hay civiles involucrados.

Fuera de la realidad

La oficina de Netanyahu aclaró que tales declaraciones están desconectadas de la realidad. El ejército hace todo lo posible para evitar atacar a los no combatientes en Gaza, agregó.

El jefe de la oposición, Yair Lapid, condenó tales dichos y los calificó de locos e impactantes al tiempo que llamó a Netanyahu a despedirlo.

Tras el escándalo, Eliyahu aseguró en la red social X que su declaración sobre el arma atómica era metafórica. Sin embargo, definitivamente se requiere una respuesta fuerte y desproporcionada al terrorismo, que aclare a los nazis y sus partidarios que el terrorismo no vale la pena, añadió el ministro.

Ni Eliyahu ni el líder de su partido Poder Judío forman parte del racionalizado foro ministerial que dirige la guerra de Gaza. Tampoco tendrían conocimiento interno de las capacidades nucleares de Israel –que no reconoce públicamente– ni autoridad para activarlas.

La agencia Ap comentó que las declaraciones son otro reflejo del malestar generalizado en Israel. La cancillería de la ANP calificó de bárbaros y racistas los dichos de Eliyahu y manifestó: esos comentarios son un claro reconocimiento de las sistemáticas masacres israelíes en los territorios ocupados y un reflejo de las campañas de incitación de funcionarios del gobierno de Benjamin Netanyahu para destruir la franja de Gaza y desplazar a su población.

La Liga Árabe aseveró: las declaraciones racistas del ministro israelí Eliyahu son reveladoras. No sólo admite que poseen un arma nuclear, sino que confirma la realidad de la abominable visión racista de los israelíes hacia el pueblo palestino.

Eliyahu encendió la polémica hace menos de tres días tras publicar un comentario en Facebook en el cual calificó de deleite para los ojos los bombardeos sobre Gaza y las operaciones militares en Cisjordania.

El Ministerio de Exteriores de Arabia Saudita deploró las declaraciones extremistas, al resaltar que demuestran la penetración de la brutalidad entre los miembros del gobierno de Israel, mientras el gobierno sirio indicó que en medio de las brutales masacres y la guerra de exterminio del régimen israelí contra el pueblo palestino, uno de los ministros terroristas de la Knéset (Parlamento) lanzó alarmantes amenazas con bombardear con armas atómicas a los palestinos en Gaza.