En el mítico Salón Los Ángeles se creó una ofrenda musical para los fieles difuntos, en la que la cumbia fue el mayor tributo. Las bandas mexicanas Tiembo Prieto y Son Rompe Pera, así como la chilena Chico Trujillo engalanaron la velada titulada A bailar con los muertos.

El grupo chileno originario de Villa Alemana, región de Valparaíso, logró que el recinto vibrara, literalmente el piso se movió debido a los saltos del público. Dirigida por la voz de Aldo Asenjo, Macha, la banda interpretó sus éxitos, entre los que destacan El conductor, Loca, Gran pecador y Tus besos son.

Chico Trujillo hizo que el público coreara fuerte sus canciones, a tal grado que los músicos se sorprendieron y por momentos dejaron de tocar para escuchar a la gente.

Entre los asistentes se observó una bandera chilena, y a uno que otro con el rostro maquillado de calavera, algunos más disfrazados de monstruos o simplemente vestidos de color negro para celebrar el Día de Muertos, pero todos bailaron, no hubo quien se quedará estático.

En el recinto lució el tradicional papel picado con el nombre de las bandas participantes; además, en medio del salón, se encontraba un pequeño diablo encerrado en una jaula hecha de carrizo.

Como invitada especial se presentó La Dame Blanche, cantante originaria de Pinar del Río, provincia más occidental de Cuba. Hija de Jesús Aguaje Ramos, director artístico de la orquesta Buena Vista Social Club, compartió con la agrupación chilena su estilo rapero.

En su participación, el grupo Son Rompe Pera mostró que, además de tocar cumbia, se rifa con punk. Después de su gira por más de 30 ciudades europeas, la banda, oriunda de Naucalpan, estado de México emocionó a los asistentes con sus temas, Pájaro cenzontle, Chucha y Cumbia algarrobera.

Kilos, percusionista de la agrupación, se lanzó desde el escenario como rock star hacia los brazos del público, que con ansias lo esperaba.

El Macha tomó la guitarra para interpretar Chaca de la Doctores.

Junto a la marimba, también interpretó el tema clásico de Los Cadetes de Linares, No hay novedad, con la cual todo el salón cantó con sentimiento.

Se recordó al rebelde del acordeón, Celso Piña (1953-2019) con el tema Reina de cumbias, pero se sustituyó el acordeón por la marimba. Los pachucos también bailaron en el escenario, en esta ocasión maquillados de calaveras y en vez de traer una pluma en el sombrero, usaron flores de cempasúchil.

El grupo abridor de ese concierto fue la banda originaria de Azcapotzalco, Tiembo Prieto. La velada concluyó en la madrugada con la actuación de Cubetitas Mi Amor, creador del proyecto itinerante Cumbia Hasta el Lunes.