Un eventual cambio de titular en la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México en estos momentos sería un riesgo y retroceso, señaló el jefe de Gobierno capitalino, Martí Batres Guadarrama.

Esto fue parte de las razones que el mandatario capitalino dio al Congreso local para pedir la ratificación de Ernestina Godoy Ramos como fiscal por cuatro años más.

En el oficio enviado a la presidenta del órgano legislativo, María Salido Magos, también destaca la autonomía con que ha dirigido la fiscalía para mejorar su eficiencia o en casos como la aprehensión del fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara, por presuntamente obstruir la justicia en un caso de feminicidio.

En total, son 21 los argumentos esgrimidos por el mandatario capitalino en el documento para solicitar la ratificación de Godoy como titular de la FGJ, que van desde los logros obtenidos en su gestión en la disminución de los índices delictivos y evitar la impunidad, como la opinión emitida por el Consejo Judicial Ciudadano, que se mostró favorable para tal escenario, tras una de las evaluaciones realizadas sobre el trabajo de la funcionaria.

Por ello, considero que un eventual cambio en la titularidad de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México puede poner en riesgo la continuidad de los trabajos emprendidos con éxito en los últimos cuatro años, implicaría un eventual retroceso en la implementación del nuevo modelo de procuración de justicia, se asienta en el oficio.

Aunado a ello, Batres Guadarrama resalta la trayectoria en la defensa de los derechos humanos y como abogada de causas sociales, así como legisladora y funcionaria pública.

Puedo dar fe del compromiso con la justicia y su independencia en el ejercicio del cargo al poner a las personas en el centro de su labor como fiscal, sin temor a las implicaciones y sin caer en la politización de los asuntos, expresa.

Entre los resultados obtenidos en la procuración de justicia en la capital del país, el jefe de Gobierno subraya la vinculación a proceso de 100 presuntos feminicidas en lo que va de este año y un aumento de 150 por ciento en la emisión de sentencias condenatorias en ese delito.

Lo anterior, apunta el documento, no significa que ahora ocurran más feminicidios, sino que ahora los casos se investigan correctamente, o eran mal clasificados al ser considerados como accidentes o suicidios.

Además, como fiscal, Ernestina Godoy ha implementado nuevos modelos de investigación basados en inteligencia policial y colaboración interinstitucional.