Guanajuato, Gto., La edición 51 del Festival Internacional Cervantino (FIC) cerró con una disminución de poco más de 40 por ciento en cuanto a derrama económica y en asistencia, en comparación con el año pasado, de acuerdo con las cifras que ofrecieron autoridades organizadoras al dar el balance final del encuentro.

Después de tres semanas, con Estados Unidos y Sonora como invitados de honor, hubo una derrama económica de 200 millones de pesos, con la asistencia de casi 160 mil personas a las actividades del festival, refirió Jesús Antonio Borja, director de educación y cultura del municipio de Guanajuato. El funcionario confirmó que hubo saldo blanco y celebró que la capital del estado es una ciudad segura para ciudadanos, artistas y visitantes.

Reconoció que con avances y retrocesos, el Cervantino aún no recupera el nivel que tenía antes de la pandemia, pues en 2019 la Secretaría de Turismo de Guanajuato calculó que asistieron 414 mil personas a la entidad, y que tuvo 615 millones de pesos en derrama económica. En 2018, el FIC reportó 367 mil 249 personas y la venta de 55 mil 500 boletos en taquilla.

Una vez más, como en los recientes años, no se anunció la entidad y el país invitados de honor en 2024, cuando se realiza el festival del 11 al 27 de octubre. Mariana Aymerich, directora del encuentro, sólo respondió: ¡Pronto, pronto verán!, ante las preguntas insistentes de los reporteros. A diferencia de otros años, ya la complejidad global no es tan difícil.

Los números son preliminares, justificó el secretario de Turismo de Guanajuato, Juan José Álvarez. Por su parte, Aymerich argumentó que no es comparable, porque la edición anterior, en la que se celebró la edición 50 del festival, fue majestuosa, con muchísimos artistas.

En 2022 se informó que se registraron datos históricos en el número de visitantes a Guanajuato, con una derrama económica de 339 millones de pesos y ocupación hotelera de 52 por ciento, además de 285 mil asistentes a la entidad. Fue el año en el que se regresó del confinamiento por la pandemia y el FIC celebró su primer medio siglo de existencia.

En la presente edición, durante las tres semanas del Cervantino, se estimó la llegada de más de 57 mil turistas con una ocupación hotelera promedio de apenas 42 por ciento.

En 2020, con la crisis sanitaria se hizo una programación virtual. En 2021, durante la 49 edición en formato híbrido, la ocupación hotelera promedio fue de 30 por ciento y una derrama de 32 millones de pesos.

En esta ocasión, las calles de Cuévano lucieron con menor afluencia de visitantes que en años pasados, cuando durante el fin de semana caminar desde el Jardín Unión hasta el callejón del beso o la Alhóndiga de Granaditas implicaba avanzar a paso lento entre la multitud. Durante los últimos sábados y domingos, aunque persistieron la algarabía y el alboroto, no se comparó con el movimiento de otras ediciones.

Destacan transmisiones electrónicas

La directora del FIC subrayó que se vendió 71 por ciento de taquilla, con poco más de 102 mil asistentes, e insistió en que son cifras preliminares, pues no se han contabilizado las plazas públicas y la Alhóndiga.

Los precios de los boletos rondaron entre 80 y 900 pesos, según del foro y el artista. Algunos espectáculos fueron de acceso gratuito, como en los Pastitos, la Plaza de San Roque y la Alhóndiga, donde, sin embargo, se pidió un registro previo vía Internet.

Sin la presencia de los gobernadores de Guanajuato y Sonora, ni del embajador de Estados Unidos en México, como tampoco de la secretaria de Cultura federal, quienes enviaron representantes a la conferencia, se brindó el balance del cierre del encuentro de artes, con la asistencia de Claudia Susana Gómez, rectora de la Universidad de Guanajuato, quien destacó que las transmisiones por medios electrónicos, como la televisión local, Canal 22 y Tv UNAM, sumados a las redes sociales, es una conjunción que se debe tener en perspectiva, pues sin duda queremos que la gente venga y aprecie en vivo los espectáculos, que pueda vivir los escenarios y la fiesta en Guanajuato capital.

A punto del mediodía, casi recién terminada la conferencia, a un par de cuadras, manifestantes acudieron con consignas y pancartas a las escalinatas del Teatro Juárez, para protestar contra la reforma judicial, justo a la hora en que el público ingresaba a la función del Ballet Hispánico.