Viernes 27 de octubre de 2023, p. 18
México ocupa el séptimo lugar en discriminación de género en Latinoamérica y el Caribe, y se encuentra por encima del promedio de los países de la región afiliados a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), reveló un nuevo estudio del organismo.
Al presentar el Índice de Instituciones Sociales y Género 2023 (SIGI, por sus siglas en inglés), realizado por el Centro de Desarrollo de la OCDE, un total de 85 países de 140 cuentan con bajos índices de discriminación de género; sin embargo, 40 por ciento de niñas y mujeres viven en naciones donde los niveles de discriminación son altos o muy altos, y entre ellos se encuentra México.
Según el documento, la discriminación contra las niñas y mujeres es mayor en el hogar, toda vez que el sexo femenino pasa 2.6 veces más tiempo que los hombres en la ejecución de tareas domésticas y de cuidado no remuneradas.
En videoconferencia, Bathylle Missika, jefa de la división de redes, alianzas y género del centro, precisó que la violencia contra las mujeres es una preocupación mundial, pues a nivel global 28 por ciento de las mujeres han sobrevivido a algún caso de violencia familiar al menos una ocasión en su vida.
Planteó que, aunque en Latinoamérica y el Caribe el promedio de discriminación de género se encuentra por debajo del mundial, Haití, Chile, Honduras, Guatemala, Trinidad y Tobago, Colombia, México y Brasil aún tienen tareas pendientes.
La especialista apuntó que entre los principales obstáculos que se tienen en la región para lograr la igualdad de género se encuentra la discriminación en el trabajo, pues ésta es alta o muy alta; también está la integridad física, pues se requieren más leyes que protejan a las mujeres, al mismo tiempo que el matrimonio infantil deja ver vicios jurídicos.
Según el documento de la OCDE, entre 2019 y 2023, cada vez más países de todo el mundo han abordado las instituciones sociales discriminatorias, en particular mediante reformas legales que protegen los derechos de las mujeres y les otorgan igualdad de oportunidades, y estos cambios en las normas sociales han resultado tanto en avances como en retrocesos, pero revelan que los prejuicios contra el empoderamiento económico de las mujeres han empeorado entre 2014 y 2022.
Entre las recomendaciones que Missika planteó para disminuir la desigualdad de género en Latinoamérica y el Caribe se encuentra el promulgar y reformar leyes que promuevan la nula discriminación, así como la igualdad de género, además de promover una transformación de las normas sociales y establecer programas de formación.
También sugirió que las mujeres se encuentren en más puestos del poder público, pues en 2023 solamente 27 por ciento de los políticos en el mundo son del sexo femenino.