Viernes 27 de octubre de 2023, p. 9
Acapulco, Gro., Ricardo apenas volvía de la inauguración de la convención minera y subió a su habitación en el octavo piso del hotel Princess, con vista al mar; la noche del pasado martes. Nadie le dijo que se resguardara.
En el evento, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, secretario general de Gobierno de Guerrero, no alertó a nadie de lo que se venía.
Personal del hotel tampoco informó a los húespedes que habría que resguardarse por el peligro debido a la proximidad del huracán Otis, categoría 5 en la escala Saffir-Simpson.
Las fuertes ráfagas de viento empezaron poco antes de la medianoche. Al inicio fue algo novedoso para Ricardo, pero conforme los vientos cobraban fuerza, el panorama se hacía cada vez más sombrío.
Cuando el ciclón golpeaba con todo su poder, Ricardo, minero que labora para Grupo Peñoles, se levantó por instinto y corrió al baño a resguardarse cuando empezaron a romperse los vidrios de las ventanas.
Regresó al cuarto para recoger su teléfono celular, cuando parte del techo se desplomó y lo sepultó, pero no lo aplastó gracias a que la cama amortiguó el impacto.
De alguna manera el techo lo protegió, pues todas las cosas de su habitación salieron volando por las ventanas rotas y lo mismo pudo haber ocurrido con él, pues su complexión es muy delgada.
El Princess, ubicado en la zona Diamante, quedó prácticamente destrozado, al igual que otros hoteles de playa donde los trabajadores calculan daños en 80 por ciento de los inmuebles.