Expone con Ada Navarro y Rob Woodcox en Queer love y otras drogas en espacio de la Roma
Martes 17 de octubre de 2023, p. 4
Una constante en el trabajo de Iran Dimas (Coacalco, estado de México, 1994), artista de formación fotográfica, es su interés por dar visibilidad y resignificar a las poblaciones empobrecidas y marginadas. Dentro de estos grupos minoritarios, vulnerables y vulnerados, Dimas destaca el sector queer, que ocupa parte de su trabajo.
Dimas participa en Queer love y otras drogas, exposición fotográfica colectiva en el espacio cultural Revuelta Queer House, cuya galería funciona desde mediados de año. También exhiben Ada Navarro y Rob Woodcox. La obra de los tres se alterna en las diferentes salas de la casa restaurada de la colonia Roma.
Con 15 años de trabajar en la fotografía, para Dimas la muestra recuerda la necesidad de reivindicar las disidencias sexuales, en particular las corporalidades. En Queer love… podemos ver diferentes tipos de personas, identidades y cuerpos. Hay que salir un poco del canon hegemónico de continuar nombrando al cuerpo como construcción desde lo masculino. Aquí hay mujeres trans y personas no binarias retratadas, además de propuestas singulares de la diversidad humana, que no atienden a un canon en específico de belleza. Las imágenes también presentan diferentes rituales afectivos
.
La obra explora diferentes formatos, desde la análoga y la digital hasta la fotografía aplicada, caso específico de Dimas, en la que intervienen técnicas fuera de las tradicionales: Hago fotografía digital y análoga, las transformo en digitales, después las llevo a negativos análogos físicos, e imprimo
. Para la exhibición imprimió una risografía –prima hermana de la fotocopia– a dos tintas, en la que deformé completamente la fotografía para quedarme sólo con siluetas y luces. Es una imagen que permite meditar más desde el color y de la textura que desde el hecho fotográfico
.
Más que observadores
Considera que en Queer love… los expositores han desarrollado una dinámica de inmiscuirse mucho más en la foto; es decir, tener más contacto con la persona retratada. Somos menos observadores pasivos en este encuentro con la fotografía. Por eso muchas de las escenas son íntimas. De alguna forma ocurren porque hay cercanía entre las personas, tanto el retratado como el que registra el momento
, señala Dimas.
del canon hegemónico de continuar nombrándolas como construcción desde lo masculino. En la muestra fotográfica hay mujeres trans y personas no binarias retratadas, así como propuestas singulares de la diversidad humana que no atienden a un canon de belleza, explica en entrevista.Foto cortesía del artista
En la última sala de la exposición el tema gira en torno a la fantasía y el deseo por medio de retratos tomados muy de cerca, en los que destacan figuras como flores, estrellas y demás marcas en la piel, que devienen registros del tiempo en el cuerpo. Se permite ver la textura de la piel.
La serie de seis fotos de Dimas sobre el tema se llama Fantasea. En ellas habla también de la juventud y lo efímero que es, tanto como una flor que se marchita, o la luz de una estrella que en cualquier momento puede dejar de ser incandescente
.
El fotógrafo exhibe ejemplos de otra serie que fue pensada para imprimirse por medio de la pintura. En la pieza II se utilizaron sólo dos colores –rojo y fiusia– para que sea fácil de imprimirse mediante la pintura. Cuesta trabajo distinguir nítidamente la imagen. Como que el contraste entre ambos colores hace que la vista se canse, incluso llega a confundirse. Es parte de un ejercicio que quise hacer al explorar el lado más lúdico de la fotografía
, precisa.
Para Dimas, las fotografías difíciles de percibir a primera vista, obligan al espectador a tomar más tiempo para reflexionar en torno a lo gráfico.
Actualmente, estamos saturados de imágenes. Las dinámicas de la visión, cómo vivimos, consumimos y creamos imágenes es irreal. Consumimos aproximadamente dos o tres mil imágenes a diario. Eso es poco porque hay personas que pasan mucho más tiempo en las redes sociales. Me gusta detenerme, pues, y hacer que el espectador al mirar mi obra eche a volar su imaginación.
La exposición Queer love y otras drogas permanecerá hasta mediados de noviembre en Revuelta Queer House (Puebla 95, colonia Roma).