La información más reciente que entregó el telescopio precisa de manera inédita la posición de más de 150 mil asteroides
Miércoles 11 de octubre de 2023, p. 6
París. La sonda espacial Gaia, dedicada a la cartografía de la Vía Láctea, entregó su más reciente cosecha de datos, que revelan medio millón de nuevas estrellas y precisan de manera inédita la posición de más de 150 mil asteroides.
El telescopio de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), que opera a millón y medio de kilómetros de la Tierra desde hace 10 años, había suministrado en su tercer catálogo de 2022 las posiciones y los movimientos de más mil 800 millones de estrellas, ofreciendo una vista en tercera dimensión muy completa de nuestra galaxia.
Sin embargo, quedaban “lagunas, pues Gaia no había explorado totalmente las zonas del cielo densas en estrellas, en particular”, denominados cúmulos globulares, indicó ESA, con motivo de la publicación de un catálogo intermedio, antes del cuarto completo a fines de 2025.
Estos cúmulos globulares tienen núcleos tan brillantes que su luz puede encandilar los telescopios que tratan de obtener una vista clara y son las piezas faltantes del rompecabezas de nuestros mapas del universo
, indica la agencia europea en un comunicado.
Gaia seleccionó el cúmulo Omega de Centauro, el más grande que se puede observar desde la Tierra, y reveló allí más de medio millón de estrellas que no habían sido observadas hasta ahora, pues estaban muy cerca unas de otras.
Este resultado, que supera las expectativas
, ofrece un mapa completo a gran escala de Omega de Centauro
, subraya Alexey Mints, coautor de la publicación y miembro del consorcio europeo Gaia.
Etapa crucial
Como los cúmulos figuran entre los objetos más antiguos del universo, su observación es una etapa crucial para los científicos que quieren confirmar la edad de nuestra galaxia
o localizar su centro, según la ESA.
Otra novedad es que Gaia precisó la posición de más de 156 mil asteroides de nuestro sistema solar situados en el cinturón de esos cuerpos (entre Marte y Júpiter), o más lejanos, como los troyanos de Júpiter.
Gracias a un largo tiempo de observación (66 meses, dos veces más que antes), la sonda calculó su periodo orbital con una precisión 100 a 200 veces mejor
que los telescopios en tierra, explicó François Mignard, responsable científico de Gaia en el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES).
Las órbitas de los grandes asteroides como Ceres, Hygiea y Metis fueron medidas de manera casi completa.
Lo anterior sirve para afinar las predicciones y las probabilidades de un acercamiento o una colisión futura con la Tierra
, precisó el astrónomo.