Según datos de la Secretaría de Salud y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el suicidio en México se incrementó 435 por ciento de 1990 a 2021, al pasar de mil 938 casos a 8 mil 351, como parte de un fenómeno que afecta particularmente a los jóvenes, señaló Paulina Arenas Landgrave, profesora de la Facultad de Sicología de la UNAM.

En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que se conmemora hoy, la especialista indicó que este factor actualmente es la tercera causa de muerte en personas entre 15 y 24 años, rango en que se ubican la mayoría de los estudiantes de nuestra universidad. Además, es la cuarta causa de muerte entre el grupo de 10 a 14 años, algo muy preocupante.

De acuerdo con la académica, la razón del aumento de los suicidios suele estar asociada con sentimientos de frustración, impotencia y desesperanza que no son adecuadamente atendidos, debido al estigma que aún tienen los padecimientos sicológicos.

Arenas puntualizó que el deseo de quitarse la vida tiene que ver con la situación personal de quien sufre este escenario, pero también influye el contexto social.

Lo que lleva a una persona a sentirse con ganas de quitarse la vida tiene que ver con el contexto que está viviendo, que le genera un alto nivel de sufrimiento emocional. Influyen en el individuo la pareja, los amigos, la familia y la sociedad en conjunto, destacó.

También intervienen factores como los tipos de violencia, consumo de sustancias tóxicas, enfermedades con dolor crónico y problemas de salud mental como depresión, ansiedad, bipolaridad, alteraciones de personalidad y sicosis.

Asimismo, reiteró que el estigma de los padecimientos emocionales es lo que impide a las personas ir al sicólogo o al siquiatra. Lo más importante de un día para la prevención del suicidio es generar conciencia de nuestra salud mental. Sólo con el cuidado de ésta podemos prevenir, entre otras conductas de riesgo, el comportamiento suicida.

En ese marco, resaltó que la UNAM creó la página electrónica https://saludmental.unam.mx en la que se ofrece información en la materia y con respecto a su atención.

Por otro lado, Arenas llamó la atención sobre el impacto de las redes sociales en las personas que no tienen un manejo adecuado de sus habilidades socioemocionales. “Si yo estoy pendiente de que pongan ‘like’ porque me genera un estado de bienestar, y más bien tengo comentarios negativos, claro que esto tiene un impacto importante en mi estado emocional”.