Al refrendar su alianza con el gobierno federal, los partidos del Trabajo (PT), Verde y Encuentro Social (PES) arremetieron ayer contra la oposición y salieron al frente de las descalificaciones al presidente Andrés Manuel López Obrador.

En la sesión de apertura del Congreso, la coordinadora de los senadores del PT, Geovanna Bañuelos de la Torre, respondió al perredista Luis Espinoza Cházaro, quien usó su tiempo en tribuna para exaltar la presencia de Xóchitl Gálvez Ruiz.

A los perredistas, dijo, debería darles vergüenza representar el eslabón perdido de la izquierda mexicana; utilizar esta tribuna, la casa del pueblo, para ensalzar a la derecha. ¡Qué triste y penoso papel de lamebotas!

Los tres partidos enaltecieron los programas y proyectos estratégicos de la Cuarta Transformación (4T). Tengan para que aprendan, les dijo la petista, pese a gritos de reproche de la oposición, y les espetó que el 1º de julio de 2018, el pueblo de México decidió terminar con décadas de abandono, corrupción, rezago y exclusión. Hoy, agregó, no se hace negocio al amparo del poder; los programas sociales no atienden a la dádiva política ni al chantaje, sino al bienestar del pueblo.

Cerramos filas con nuestro movimiento y con el proyecto de nación que encabeza el presidente López Obrador y los convocamos a mantenernos unidos para enfrentar los retos por venir.

La senadora Elvia Marcela Mora Arellano, del PES, expresó su reconocimiento a las mujeres que aspiran, en el siguiente año, a dirigir este país. En especial, permítanme la licencia, no, ella sabe quién es, con lo que atajó gritos de la oposición en apoyo a Gálvez Ruiz.

Afirmó que se requiere consolidar la 4T y el futuro será feminista. En respuesta a los gritos de la oposición, destacó que en el gobierno de López Obrador “ya no hay huachicol, aunque les duela”, y ya no se permite la condonación de impuestos, por eso están tan enojados.

El senador verde Raúl Bolaños-Cacho Cué señaló que es indudable que aún falta mucho por hacer y profundizar en el proyecto de nación que ha planteado este movimiento, pero también es innegable que un cambio real en el liderazgo nacional resultaba necesario para transitar a los nuevos tiempos y a sus exigencias.