La senadora chilena Isabel Allende Bussi sostuvo que la conmemoración que realiza México por los 50 años del golpe de Estado contra su padre, Salvador Allende, da nuevamente un ejemplo de solidaridad, fraternidad y unir pueblos.

En el anuncio del programa Chile: 50 actividades culturales, 50 años, la política chilena agradeció por recordar a Allende, demócrata y gran luchador social, consecuente, que además nos enseñó que la ética y la política iban de la mano, y que eran posibles las trasformaciones sociales con democracia, pluralismo y libertad. Eso fue muy inspirador para muchas generaciones.

Se congratuló de que el presidente Andrés Manuel López Obrador llevará en septiembre una película restaurada del cineasta Miguel Littín para entregarla a la Cineteca Nacional de Chile, como se anunció durante la conferencia.

Las actividades reúnen exhibición de 31 películas, conciertos, encuentros académicos, exposiciones y otras presentaciones artísticas, con la participación de 18 instituciones mexicanas. Destaca la muestra fotográfica de Marco Ugarte, Testimonios de mujeres en resistencia.

Allende Bussi refirió que había una relación muy estrecha entre ambos países luego de que los mandatarios Salvador Allende y Luis Echeverría realizaron visitas recíprocas. México nos abrió las puertas, nos acogió. Llegaron a ser más de 700 asilados entre la cancillería y la embajada mexicana en Chile. La conducta del embajador Gonzalo Martínez Corbalá fue extraordinaria.

Destacó que la conmemoración en nuestro país con un conjunto de actividades inolvidables le recordó el Chile donde la cultura también se expresó de manera maravillosa, y teníamos las ediciones masivas de Quimantú y los conciertos que entregaban Inti-Illimani y Quilapayún, que afortunadamente estaban fueran durante el golpe y eso lo salvo.

Añadió: Gracias por esto que van a hacer, por todo ese cariño, esa solidaridad sigue vigente. Necesitamos recordar, vivir con nuestra memoria para también saber mejor qué no deberíamos hacer y aquello que sí. Siempre vamos a perseguir el anhelo de justicia social y una mejor sociedad.

Por su parte, Alicia Bárcena, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), refirió que queda la responsabilidad de sanar “la trágica ruptura de la democracia en Chile que hace 50 años abrió una cicatriz en la historia de todo nuestro continente.

Cuando vino Allende, era una etapa muy difícil, porque íbamos saliendo del 68 y la masacre de 1971. Su llegada nos abrió la esperanza a los jóvenes que estuvimos en esos movimientos sociales. Luis Echeverría debía mucho a Allende desde ese momento. Por eso, cuando fue el golpe, qué bueno que Echeverría reconoció la grandeza de Allende y su democracia, y se portó a la altura, (algo) que a veces no le ofreció a su propio pueblo.

Inspiró nuestra vocación social

Bárcena dio la bienvenida a Isabel Allende, quien convoca a la reflexión, a la memoria y también nos invita a reorientar nuestra mirada a un futuro más próspero, más igualitario, más progresista, más sostenible.

Mencionó que durante su gestión de embajadora en Chile se dedicó a hacer de este año uno memorable. Se está logrando en México, y se va a lograr en Chile, porque va a ir el presidente López Obrador, que no viaja, pero va a viajar, porque para él, Salvador Allende nos inspiró a tener vocación social y nos mostró que otro mundo era posible.

Hizo hincapié en que son momentos para “preservar la memoria histórica y garantizar la no repetición de hechos dolorosos, como los que vivió Chile, porque nadie quiere una regresión autoritaria en ninguna parte.

Chile y México comparten este irrenunciable compromiso con la defensa de los derechos humanos, por eso me emociona mucho que estemos aquí para conmemorar 50 años del golpe de Estado en Chile. Que no se nos olvide.

Concluyó con una cita de Salvador Allende: Algún día, América tendrá una voz de continente, una voz de pueblo unido, una voz que será respetada y oída, porque será la voz de pueblos dueños de su propio destino.

Al acto también asistieron el senador chileno José Miguel Insulza; Beatriz Sánchez, embajadora de Chile en México; el fotógrafo Marco Ugarte, y Alejandra Frausto, titular de la Secretaría de Cultura federal.