Desde hace más de 30 años, los investigadores provenientes de las áreas médicas o de las ciencias biológicas han acaparado el liderazgo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y todos ellos –con excepción de uno– han completado los dos periodos cuatrienales que les permite la ley de la institución educativa.

De cara a la sucesión en la rectoría de la máxima casa de estudios –cuya convocatoria se hará pública este lunes–, una de las preguntas en círculos cercanos a la universidad es si el nuevo titular del organismo será nuevamente un profesional de la salud o si habrá un cambio en el gremio del cual provenga la persona designada por la Junta de Gobierno.

El rector Enrique Graue Wiechers es médico cirujano con especialidad en oftalmología por la universidad, y cuenta con una subespecialidad en córnea y enfermedades externas por la Universidad de Florida.

Llegó al cargo en 2015 y al término de su primer periodo, en 2019, fue designado para cumplir un segundo mandato, que concluye este año.

Antes de él, otro médico ocupó el puesto de mayor responsabilidad en la universidad. José Narro Robles, con título de cirujano por la UNAM, fue director de la facultad de medicina y realizó estudios de posgrado en medicina comunitaria en la Universidad de Birmingham, Inglaterra, y designado en el puesto en 2007 hasta 2015.

El antecesor de Narro fue otro doctor, Juan Ramón de la Fuente. El actual representante de México ante las Naciones Unidas –quien en septiembre dejará el cargo para volver a la Universidad– es médico con especialidad en siquiatría con estudios de posgrado en la Universidad de Minnesota. También cumplió los periodos que le permite la ley, de 1999 a 2007.

El único de los últimos rectores que no terminó su periodo debido a la huelga estudiantil de 1999-2000, fue Francisco Barnés de Castro. De formación ingeniero químico y con estudios de posgrado en la Universidad de Berkeley, fue nombrado por la Junta de Gobierno en 1997, pero sólo cumplió dos años al frente de la UNAM.

Previamente, la universidad fue dirigida por José Sarukhán Kermez, quien se graduó como biólogo e hizo estudios doctorales en la Universidad de Gales. Permaneció como rector de 1989 a 1997.

Desde que la Universidad Nacional obtuvo su autonomía en 1929, el gremio que ha aportado mayor cantidad de rectores de la máxima casa de estudios es el de los abogados, con un total de nueve.

Los médicos son la segunda profesión que ha ocupado en más ocasiones el puesto, con ocho.

Lejos de esa cifra, los químicos y los biólogos han dirigido la institución dos veces cada uno, y los ingenieros y sociólogos una sola ocasión; éstos últimos encabezados por Pablo González Casanova.