Kazajistán, Kirguistán, Turkmenistán, Tayikistán, y Uzbekistán, en el encuentro
Viernes 19 de mayo de 2023, p. 22
Xi’an. El presidente chino, Xi Jinping, celebró ayer el inicio de una nueva era
en las relaciones de la potencia asiática con los países de Asia Central, al abrir la primera cumbre con cinco ex repúblicas soviéticas de esa región: Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán.
Xi sostuvo que China y los países de Asia Central han inyectado energía positiva a la paz y el desarrollo regionales y han hecho nuevas contribuciones a la construcción de una comunidad de futuro compartido para la humanidad.
Estoy convencido de que nuestro compromiso común hará de la cumbre un gran éxito e inaugurará una nueva era en las relaciones China-Asia Central
, declaró Xi en un banquete en Xi’an en el centro de China, con los mandatarios de Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán.
Esta es la primera cumbre de este tipo desde que se establecieron relaciones diplomáticas entre China y estos países en 1992, tras el colapso de la Unión Soviética.
La reunión, que el gobierno chino calificó de una importancia trascendental
, se celebra en la ex capital imperial de Xi'an, que fue el extremo oriental de la antigua Ruta de la Seda por la cual China realizaba desde tiempos antiguos intercambios comerciales con Europa y Medio Oriente.
Los cinco países invitados estuvieron ligados durante siglos al Imperio Ruso y después a la Unión Soviética y mantienen hasta ahora vínculos económicos, lingüísticos y diplomáticos estrechos con Moscú.
Pero, con la guerra en Ucrania, la influencia rusa ha languidecido y, según los expertos, el presidente chino busca cubrir ese espacio dejado por Moscú para expandir la proyección internacional y la influencia de su país.
La cumbre coincide con la reunión del G-7 en Hiroshima que reúne a los mandatarios de las economías más avanzadas: Canadá, Francia, Estados Unidos, Alemania, Italia, Japón y Reino Unido. El presidente estadunidense Joe Biden, que considera a Pekín un rival estratégico de su país. Japón invitó además a los gobernantes de India, Brasil e Indonesia, entre otros, buscando acercarse a países en desarrollo donde China realiza cuantiosas inversiones.
Nuevas Rutas de la Seda
Los intercambios comerciales de China con las cinco ex repúblicas soviéticas alcanzaron los 70 mil millones de dólares el año pasado y registraron un aumento interanual de 22 por ciento en el primer trimestre de 2023, según datos de Pekín.
Esas ex repúblicas soviéticas ocupan un lugar central en el proyecto chino denominado Nuevas Rutas de la Seda. Este plan, lanzado en 2013 por Xi, es un desarrollo faraónico que busca construir carreteras, puertos, líneas de ferrocarriles e infraestructuras en el extranjero con capitales chinos.