Martes 18 de abril de 2023, p. 8
La falta de vínculos y apego emocional, agresiones físicas, verbales y/o sexuales, o entornos en los que los menores de edad conocen que un porcentaje de los ingresos familiares provienen de actividades delictivas, son parte de las violencias que padecieron durante su infancia o adolescencia las personas privadas de su libertad, revela el informe 2023 en esta materia elaborado por la organización Reinserta.
Al presentar detalles de los hallazgos recabados tras la aplicación de 5 mil 559 encuestas en cárceles de 14 entidades del país, los entrevistados relataron haber tenido desde edades tempranas episodios de violencia que normalizaron, y en muchos de los casos los repitieron en su edad adulta.
Nueve de cada 10 dijeron haber tenido contacto con al menos una actividad delictiva antes de los seis años de edad y muchos sufrieron violencias que se incrementaron a partir de los 12 años. Además, dos de cada 10 declararon haber tenido conocimiento en la niñez que parte de los ingresos familiares provenían de actividades ilegales.
En tanto, siete de cada 10 personas reportaron haber vivido en su niñez al menos una experiencia negativas dentro del hogar, antes de los seis años se quedaron sin comer uno o varios días o sintieron que nadie los quería o que no eran importantes, detalló Marina Flores, directora de investigación de Reinserta Lab.
Durante la presentación de los resultados en conferencia de prensa, Israel Castillo, presidente de la Asociación Mexicana de Sicotrauma, explicó que dichas causas generan traumas que, al no ser atendidas, repercuten en el desarrollo de las personas.
Para revertirlo, subrayó, lo que se requiere es atender los vínculos emocionales que estuvieron ausentes en los primeros años de la infancia en muchos de los casos.
Al respecto, la senadora Josefina Vazquez Mota expuso que la renuncia del Estado a atender el problema tiene consecuencias incalculables
y reprochó que aún faltan protocolos para detectar, prevenir y sancionar a quienes violentan a menores.
Señaló que en el presente periodo legislativo han sido aprobados en el Congreso prácticamente todos los dictámenes puestos a discusión a favor de la niñez, pero, junto con la senadora Patricia Mercado, reconocieron que muchos temas siguen pendientes por falta de acuerdo con el bloque mayoritario en el órgano legislativo.
Tania Ramírez, directora ejecutiva de Redim, agregó que las familias a menudo no cuentan con las herramientas para poder sobrellevar estas condiciones adversas, por lo que es al Estado al que le toca acercar alternativas. No hay cerebros de los buenos y de los malos, sino personas que tuvieron a la mano herramientas para tener un mejor desarrollo
, indicó.
Aunque recalcó que se debe promover un cambio cultural, insistió en que hay obligaciones institucionales que no se pueden eludir, incluidas las financieras para destinar los recursos suficientes al desarrollo de los infantes y adolescentes.