El gigante asiático ha sido clave para restaurar las relaciones diplomáticas entre ambos países
Domingo 12 de marzo de 2023, p. 21
Pekín. China aseguró ayer que su mediación en el acuerdo entre Irán y Arabia Saudita para reabrir sus respectivas embajadas no debe ser interpretada como gesto de injerencia en las relaciones regionales, donde ambos países son dominantes
.
Pekín no tiene intención de llenar un supuesto vacío ni de crear bloques exclusivos, y no lo hará
, afirmó un vocero del gobierno citado por la agencia de noticias oficial Xinhua. Afirmó que el gigante asiático respeta la posición de los estados de la región como dueños de la zona y se opone a la competencia geopolítica en Medio Oriente.
El vocero afirmó que Arabia Saudita e Irán reafirmaron su adhesión a los propósitos y principios de la Carta de la Organización de Naciones Unidas, así como a las normas básicas de las relaciones internacionales, incluida la de no injerir en los asuntos internos de los estados, lo que está en línea con la tendencia de los tiempos. China lo aplaude y felicita a ambas partes
, precisó.
Afirmó que Pekín será un promotor de la seguridad y la estabilidad, un socio para el desarrollo y la prosperidad y un partidario del desarrollo de la región a través de la solidaridad.
El gigante asiático ha sido clave en la mediación para un acuerdo que restaura las relaciones diplomáticas entre Teherán y Riad, rotas en 2016 tras un ataque contra misiones sauditas en Irán a manos de manifestantes que pedían detener la ejecución del clérigo chiíta Nimr al Nimr.
El empujón final para este convenio llegó tras cinco días de conversaciones en Pekín entre los máximos responsables de seguridad de sus respectivos países, el asesor de Seguridad Nacional saudita, Musad bin Mohamed al Aiban, y el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de la República Islámica de Irán, el almirante Alí Shamjani.
Una amenaza común
En tanto, la ministra de Inteligencia israelí, Gila Gamliel, destacó que Irán es el verdadero motivo por el que la estabilidad regional está en riesgo
y sostuvo que Israel ya no es percibido como enemigo por la mayoría de sus vecinos
en la región, en referencia a la firma de los conocidos como Acuerdos de Abraham, en 2020, a los que se unieron Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Sudán y Marruecos.
Gamliel, quien intervino en la clausura del décimo Foro Global de Bakú, organizado por el Centro Internacional Nizami Ganjavi, señaló: Los países moderados de la región hacen frente a un enemigo y amenaza común que deben superar juntos
, antes de expresar que Irán no es sólo una amenaza para Israel, sino para todo Medio Oriente y más allá
.