Viernes 10 de febrero de 2023, p. 19
Washington. El nuevo jefe de comercio agrícola de Estados Unidos, Doug McKalip, dijo el jueves a Reuters que dio a México hasta el 14 de febrero para responder a una solicitud de Washington y que explique el fundamento científico detrás de las prohibiciones previstas al maíz genéticamente modificado y al herbicida glifosato.
McKalip, el nuevo negociador en jefe de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés), señaló que la respuesta de México ayudará a la agencia comercial a decidir los próximos pasos en su intento de resolver una larga disputa sobre políticas agrícolas biotecnológicas.
Veremos qué contienen esas respuestas. Y entonces, en función de dónde nos encontremos en ese proceso, daremos los siguientes pasos para intentar resolver la situación
, dijo McKalip.
Esto podría ser un avance en el camino para tomar medidas formales en el contexto del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) , que incluirían buscar consultas sobre la disputa o solicitar un panel de solución de controversias para determinar si las políticas de México violan el acuerdo comercial.
La petición de Estados Unidos se produjo en una carta enviada por el USTR el 30 de enero a la Secretaría de Economía en la que se solicitaban pruebas científicas de las prohibiciones y las evaluaciones de riesgo que respaldan las decisiones, que son obligatorias en virtud del acuerdo comercial iniciado en 2020.
México rechazó 14 rasgos de productos agrícolas por separado que se les presentaron y no proporcionaron ninguna justificación
, dijo McKalip a Reuters.
Queremos asegurarnos de que hacen ciencia, muestran su trabajo y toman decisiones basadas en evaluaciones de riesgo
, señaló.
Ambos países han estado enfrentados por un decreto emitido por el presidente Andrés Manuel López Obrador en 2020 que buscaba eliminar gradualmente las importaciones de maíz genéticamente modificado para consumo humano y el herbicida glifosato para 2024.
En diciembre, México ofreció retrasar la aplicación de la prohibición hasta 2025, pero McKalip dijo que los retrasos y más excepciones no resolverían el problema de fondo, que es que la ciencia debe impulsar las decisiones sobre estos productos
.
Además argumentó que la prohibición está afectando las decisiones de siembra de los agricultores estadunidenses para algunos productos.