García Luna: cloaca destapada // AMLO: 700 millones en juego // Derecha recalcitrante y fascista
l juicio contra Genaro García Luna apenas agarra nivel y ya salen chispas, varios trapos al sol, que, desde luego, no serán los únicos: desde el multimillonario pago que presuntamente recibía de los cárteles hasta el levantón que la fracción de los Beltrán Leyva hizo por la traición
del ex funcionario, según la versión de Sergio Villarreal, El Grande, ex policía y narco, la combinación perfecta
en materia de tráfico de drogas. ¿Cuántos no habrá así?
La Jornada (David Brooks) informa que el ex funcionario “fue levantado en la carretera rumbo a Cocoyoc, en Morelos, y se lo llevaron a una ‘oficina’ para verse con Beltrán Leyva y mostrar ‘que no había nada imposible para Arturo’. Le reprochó por el arresto de su hermano Alfredo y lo liberó. Continuó la colaboración y los pagos por Beltrán Leyva” (originalmente asociado al cártel de Sinaloa). García Luna traicionó a México y a Estados Unidos, al volverse cómplice del que era el cártel más poderoso de su país
, denunció la fiscalía.
Con el transcurrir de los días, de ese juicio saldrán chispas y a flote toda la bazofia de García Luna, en particular, y de la guerra
contra el narco iniciada por el tal Borolas –hoy cómodamente protegido por los fascistas españoles– que sólo fortaleció a uno de los cárteles, el de Joaquín El Chapo Guzmán, y para ello dejó un regadero de cadáveres por toda la República.
Poco a poco (en un juicio que se prolongará ocho semanas) se conocerán los nombres de los implicados –funcionarios, periodistas, narcotraficantes y demás– en los sucios tejes y manejes de García Luna a lo largo de su participación en el gobierno federal (con Fox y Calderón en Los Pinos): como director de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI, durante la cual se dio el montaje de Loret de Mola contra la pareja Vallarta-Cassez, el cual, todo indica, con él y sus escribanos no fue excepción sino norma) y después como secretario de Seguridad Pública, sin olvidar su paso por la cloaca conocida como Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen). Y, sin duda alguna, en el centro de todo esto se encuentran los dos panistas que ocuparon Los Pinos ) léase la docena trágica).
Ayer, el presidente López Obrador se refirió al citado juicio: es importante informar, porque, primero, es muy vergonzoso; se trata de una autoridad del más alto nivel que estaba a cargo de la seguridad pública en el gobierno de Calderón y tenía doble función, según las acusaciones que está haciendo el gobierno de Estados Unidos: que al mismo tiempo que se encargaba de la seguridad pública, protegía a uno de los cárteles o estaba al servicio de un grupo de la delincuencia organizada y recibía dinero por eso
.
El mandatario subrayó la necesidad de que se informe sobre el juicio. Ya se está hablando de los cómplices de García Luna, de algunos que trabajaron con él. Pero es un drama judicial; como diría el escritor José Agustín, una tragicomedia, y no queremos que pase de noche o la gente no se entere, porque sinceramente no confiamos en los medios convencionales en el país, pues guardaron silencio por mucho tiempo, incluso avalaron acciones vinculadas con los gobiernos anteriores, sobre todo en el tema de corrupción. Y repito: no todos los medios, pero sí aquellos con más capacidad de informar masivamente no están hoy muy dispuestos a hacerlo, a garantizar el derecho del pueblo a saber. Entonces, por eso vamos a estar informando
.
No sólo eso. Anunció: vamos a procurar recoger el dinero (que se atribuye a García Luna). Es más, hay un juicio, 700 millones de dólares, en Florida, y sus abogados plantearon que no tenía México por qué ir a litigar allá, y un juzgado en Florida nos dio la razón; es decir, sí podemos, y se está trabajando en eso, 700 millones de dólares y otros posibles activos
. Todo, en apenas dos días de juicio. ¡Y lo que falta!
Las rebanadas del pastel
Al inaugurar la cumbre de la Celac, el presidente argentino, Alberto Fernández, denunció: la democracia está en riesgo por sectores de ultraderecha que se han puesto de pie y amenazan a nuestros pueblos; no debemos permitir que esa derecha recalcitrante y fascista ponga en riesgo la institucionalidad de nuestros pueblos
… Cínica hasta el tuétano: la feroz represión por ella desatada ha cobrado la vida de 60 peruanos, pero ahora la golpista Dina Boluarte pide
una tregua nacional
y mesas de diálogo
. ¡Qué cara más dura!