Miércoles 25 de enero de 2023, p. 23
Para las administradoras de fondos para el retiro (Afore) y para el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) en general, 2022 fue su peor año desde que existe registro, es decir 1997, pues el ahorro pensionario de los trabajadores tuvo una pérdida de valor histórica; la utilidad neta de las administradoras se desplomó y los retiros por motivo de desempleo llegaron a un monto sin precedente.
Datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) señalan que en 2022 las Afore reportaron minusvalías para los trabajadores por alrededor de 215 mil 500 millones de pesos, las más altas desde el nacimiento del sistema, siendo además más de 20 veces superiores al récord anterior que era de 9 mil millones en 2018.
Una minusvalía es una disminución en el valor de un activo, en este caso los ahorros de los trabajadores; cuando el valor sube, es una plusvalía. Ambas situaciones se convierten en pérdidas o ganancias cuando se vende el instrumento de la inversión o se retira el activo, lo que no sucederá hasta que las personas lleguen al momento de la jubilación.
El golpe pensionario a los trabajadores no sólo ha sido por el lado de los nulos rendimientos y abundantes pérdidas, sino también por los retiros por desempleo, pues según cifras de la Consar, el año pasado 1.9 millones de mexicanos se vieron en la necesidad de disponer de 23 mil 169 millones de pesos al haber perdido su trabajo.
Datos de la Consar indican que entre enero y diciembre de 2022 las Afore obtuvieron utilidades por 5 mil 845 millones de pesos, un desplome de 63 por ciento respecto a los 16 mil 175 millones de pesos del año previo.
Es el segundo año en sus ganancias disminuyen, pues en 2021 la caída fue de 10.9 por ciento, dado que en 2020 obtuvieron utilidades récord de 18 mil 172 millones de pesos.
Las 10 administradoras que operan en el mercado mexicano obtienen sus ingresos de la comisión de 0.57 por ciento anual que cobran a los más de 70 millones de mexicanos por administrar sus más de 5 billones de pesos producto del ahorro pensionario. No obstante, a dichos ingresos por comisión deben descontar impuestos.
Históricamente, al cobrar la comisión sobre el saldo acumulado del ahorro, poco importa que las Afore entreguen plusvalías o minusvalías a los trabajadores.