Martes 6 de diciembre de 2022, p. 20
Tras sorprender de manera positiva
este año, el área de análisis de la calificadora Fitch Ratings revisó al alza su pronóstico de la tasa de crecimiento económico de México para este año, al pasar de una expectativa previa de 2.5 por ciento a 3 por ciento. Sin embargo, la economía nacional sólo podrá crecer el próximo año casi la mitad de lo que lo hará este año.
En su reporte Perspectivas económicas mundiales. Diciembre 2022. Inflación, subidas de tasas de interés y recesiones, la firma destacó que la evidencia apunta hacia una mayor demanda de la producción de México, aunque no se ha traducido en mayor inversión y reubicación de proveedores fuera de China
.
Fitch destacó que México se ha visto beneficiado por el crecimiento del consumo y del mercado laboral, así como del aumento de las remesas, y de las exportaciones hacia Estados Unidos este año, pero para el 2023 se alentará, perjudicado por la recesión económica de su principal socio comercial, al que dirige alrededor de 80 por ciento de sus exportaciones, y de que la inversión en el país no recupera los niveles del último máximo de julio de 2018.
El nuevo pronóstico de la firma coincide con la nueva estimación que realizó el Banco de México la semana pasada, con un avance del PIB nacional de 3 por ciento.
Sin embargo, para 2023, la economía mexicana registrará una considerable desaceleración, pues la estimación de crecimiento que tiene el área de análisis de Fitch Ratings consideran que aumentará 1.4 por ciento y 1.6 por ciento en 2014, cuyas proyecciones las mantuvo con respecto a su reporte de septiembre.
Una de las causas será la recesión económica que registrará Estados Unidos a partir del segundo trimestre de 2023, y que sólo le permitirá crecer 0.2 por ciento interanual, según pronosticó la calificadora.
Descarrilar
Alertó que la alta inflación puede hacer descarrilar un consumo sólido. Además, la inversión lenta sigue limitando las perspectivas de crecimiento económico de México.
La débil confianza empresarial se relaciona en parte con la incertidumbre regulatoria, particularmente en el sector eléctrico. El gobierno de Estados Unidos inició un proceso de consulta en el marco del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá, alegando que recientes decisiones de política energética y eléctrica son contrarias a las del convenio
, destacaron Brian Coulton y Pawel Borowski, especialistas económicos de Fitch y autores del estudio.