ada año el Institute for Policy Studies (Instituto de Estudios Políticos, IPS) convoca a reconocer esfuerzos en América dedicados a la defensa de los derechos humanos. El IPS es una prestigiosa organización que dedica su labor a la construcción de una sociedad más justa y equitativa, ecológicamente sostenible y pacífica. Todo su trabajo se destaca por llevarlo a cabo con movimientos y organizaciones sociales de base, buscando hacer que crezcan ideas y acciones políticas transformadoras.
El Premio de Derechos Humanos Letelier-Moffitt se instauró en 1978 en memoria del diplomático chileno Orlando Letelier, quien fue un político y embajador chileno, miembro del gobierno de la Unidad Popular (UP) de Salvador Allende, en el cual fue ministro de Estado, y de Ronni Karpen Moffitt, una activista política estadunidense de izquierda y colaboradora del IPS. Ambos fueron víctimas del estallido de una bomba colocada en su automóvil mientras transitaban por el Sheridan Circle en Washington, por orden del dictador chileno Augusto Pinochet. Desde entonces, este premio ha reconocido ampliamente a personas, organizaciones y agrupaciones de derechos humanos, en el impulso y defensa de los derechos humanos en este continente.
Manuel Pérez Rocha Loyo, integrante del IPS, dada la importancia de este asunto, también dedicó una de sus columnas en La Jornada (10/10/22), donde señaló: es un premio prestigioso. Tan sólo este año dos de sus ganadores han sido elegidos presidentes de sus países: Gabriel Boric, cuyo Movimiento Estudiantil Chileno, del cual fue líder, lo recibió en 2012, y Gustavo Petro, primer presidente progresista de Colombia, en 2007. Y este mes, Luiz Inácio Lula da Silva, ganador del galardón en 2003, está cerca de regresar a la presidencia de Brasil
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Para México, las y los compañeros del IPS (https://ips-dc.org/), en coordinación con otras organizaciones de Estados Unidos, han otorgado el mismo reconocimiento en diversas versiones al obispo don Samuel Ruiz y al Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas; asimismo, a la Casa del Migrante de Saltillo. También a la Coalición por la Justicia en las Maquiladoras, y a Alianza Cívica. En su versión internacional 2022, el reconocimiento fue otorgado al Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México (MNDM), y en su versión nacional, al Amazon Labor Union.
En palabras del director del IPS, Tope Folarin, se reconoce que estas dos agrupaciones son ganadoras de los premios no sólo por promover la causa de los derechos humanos, sino también por sus contribuciones históricas al movimiento de los derechos laborales en Estados Unidos, y al movimiento por la justicia para los desaparecidos en México. Ambas organizaciones han demostrado el increíble poder de la acción colectiva de la gente común y sencilla, que lucha por mejores condiciones de vida para sus comunidades
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El MNDM está conformado por más de 80 colectivos de familiares de personas desaparecidas, con presencia en casi la totalidad de estados de la República, y mantienen relación con colectivos de familiares de Centroamérica. Su principal objetivo ha estado en articularse entre familiares de personas desaparecidas para dar con el paradero de todas ellas, así como revertir la crisis de las desapariciones que enfrenta México, buscando verdad y justicia para las víctimas de este flagelo.
Por su parte, Amazon Labor Union es un sindicato independiente, específicamente para trabajadores de Amazon, creado el 20 de abril de 2021. Se trata de un proceso inédito y una lucha sorprendente por la sindicalización en Estados Unidos. Sus demandas se relacionan con mejores salarios, beneficios y condiciones de trabajo dignas. Frente a una empresa tan poderosa como Amazon, los trabajadores se organizaron para que ésta les trate con respeto, ejerciendo sus derechos humanos, como el de sindicalizarse. Esto, dados los abusos de la firma contra sus trabajadores, registrados mayormente en la crisis y años de la pandemia de covid-19.
Este reconocimiento, su trayectoria y prestigio, nos hacen recordar la necesaria lucha continental por los derechos humanos y la paz. América por décadas ha contado con redes de apoyo y solidaridad internacional; por ello, cada vez que surgen reconocimientos de este tipo, es de valorarse la experiencia compartida y encarnada por un mundo más digno y justo.
En este 2022, nuevamente el Premio Letelier-Moffitt nos convoca a reconocernos trabajando desde abajo por la paz con justicia y dignidad. En tiempos de retrocesos y amenazas a los derechos humanos, este tipo de convocatoria nos recuerda la importancia de rescatar principios éticos y políticos de solidaridad, como el internacionalismo. Igualmente es relevante que surjan redes y se sostengan también desde el seno de la sociedad civil y organizaciones progresistas de Estados Unidos.