Viernes 21 de octubre de 2022, p. 12
Tijuana, BC., La tensión en la estación del Instituto Nacional de Migración (INM) en esta ciudad, donde la noche del martes unos 300 venezolanos se amotinaron, ha ido disminuyendo con el paso de las horas, luego de que el gobierno mexicano proporcionó un camión a un grupo de más de 40 que quiso volver al sur del país; trasladó al aeropuerto a otros tantos que consiguieron un boleto de avión para otras entidades y les ha permitido comunicarse con familiares y amigos.
En un video grabado por uno de los indocumentados que estaba retenido en la estación de la Esmeralda, se observó cómo cinco agentes del INM fueron retenidos
por los sudamericanos que se rebelaron. Alrededor de las 19 horas de ese día, los venezolanos deportados por Estados Unidos consiguieron abrir las celdas y se amotinaron en los pasillos; en ningún momento pusieron en riesgo la integridad de los custodios, pero los retuvieron durante las negociaciones.
La revuelta generó un fuerte dispositivo en el que participaron diversas corporaciones policiacas, y aunque no hubo información oficial, la grabación muestra cómo el delegado de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl Ramírez, el delegado del INM, Manuel Alfonso Marín, y otros funcionarios negocian con los inconformes.
Si bien las instalaciones federales no son consideradas centros de detención, tienen áreas con rejas y restricciones de movilidad. Los venezolanos se quejan de que viajaron incluso meses para llegar a Estados Unidos y, de repente, están en México, sin comer, teléfonos ni una salida a su situación.
La inconformidad se debe no sólo a ser confinados en instalaciones diseñadas para 150 personas (ellos eran más de 300), sino que fueron sometidos a más de 16 horas sin alimentos, en su traslado de Texas a San Diego y de ahí a Tijuana.
De acuerdo con fuentes extraoficiales, en la estación quedan ya menos de 100 venezolanos, sin embargo, se espera que lleguen más en los próximos días, muchos de ellos desde Texas, por donde cruzaron a Estados Unidos.